“En el gabinete hemos decidido que, siempre que sea posible, sustituiremos componentes, por ejemplo en la red 5G, por componentes de fabricación propia. Y no permitiremos ningún componente procedente de China en la red 6G”, declaró el canciller Merz en una conferencia empresarial celebrada en Berlín el 13 de noviembre.

La decisión de Alemania refleja la creciente preocupación en Europa por su dependencia de la tecnología extranjera, y el continente está preocupado por su dependencia de todo, desde semiconductores asiáticos hasta inteligencia artificial (IA) e infraestructura de computación en la nube estadounidense, especialmente a medida que las tensiones geopolíticas y comerciales amenazan las cadenas de suministro vitales.
El año pasado, Alemania ordenó a las operadoras de telecomunicaciones que retiraran los equipos de Huawei de sus redes centrales, alegando riesgos para la seguridad nacional. Según informó Bloomberg el mes pasado, Berlín está considerando utilizar fondos públicos para pagar a operadoras como Deutsche Telekom AG y otras empresas nacionales para que retiren los equipos chinos.
El canciller Friedrich Merz afirmó que plantearía el tema en la cumbre sobre soberanía digital que se celebrará la próxima semana con el presidente francés Emmanuel Macron.
“Discutiremos con la industria qué podemos hacer, no solo para independizarnos de China, sino también, por ejemplo, de Estados Unidos, de las grandes empresas tecnológicas”, subrayó el Sr. Merz.
Sin embargo, el líder de centroderecha también descartó una ruptura total con China, el segundo socio comercial más importante de Alemania. «No podemos hacerlo», afirmó. «China tampoco puede, pero para nosotros es aún más difícil».
Fuente: https://congluan.vn/duc-loai-bo-cac-cong-ty-trung-quoc-khoi-viec-xay-dung-mang-6g-10317747.html






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