El deseo de tener una piel de aspecto más joven ha impulsado una industria mundial del cuidado de la piel que vale casi 150 mil millones de dólares al año, de los cuales 17 mil millones se gastan solo en productos antienvejecimiento.
Sin embargo, según los dermatólogos, por muy valiosas que sean las cremas o los tratamientos cosméticos, solo representan la "línea de defensa externa". Alrededor del 80 % de los signos del envejecimiento provienen del sol, y el resto está fuertemente influenciado por el estilo de vida, especialmente la dieta.
Estudios nutricionales muestran que los alimentos ricos en vitaminas, grasas saludables y antioxidantes pueden proteger la piel de los radicales libres, reducir la inflamación y estimular el colágeno, factores clave que mantienen la piel firme, tersa y retrasan el envejecimiento.
Aquí hay 10 alimentos fáciles de encontrar que ayudan a retrasar el envejecimiento de tu piel, manteniendo tu apariencia más joven que tu edad real.
1. Aguacate: un "almacén" de vitamina E y grasas buenas
Los aguacates son ricos en vitamina E liposoluble, que ayuda a proteger la piel de la oxidación, el daño solar y la degradación del colágeno.
Las grasas monoinsaturadas del aguacate ayudan a la piel a retener la humedad, estabilizar el pH y reducir la sequedad y la inflamación. Además, son un alimento ideal para ayudar al cuerpo a absorber las vitaminas liposolubles.
2. Salmón: una fuente de omega-3 que nutre la piel sana.
El salmón contiene grandes cantidades de omega-3, grasa poliinsaturada que reduce la inflamación, repara los daños, aumenta la elasticidad y mantiene la piel suave.
El omega-3 también ayuda a limitar los efectos de la luz solar. Por el contrario, la falta de ácidos grasos provoca sequedad y descamación de la piel.
Además, reducir el consumo de alimentos ricos en omega-6 procedentes de aceites vegetales y alimentos procesados también ayuda a equilibrar la proporción omega-3 – omega-6 lo que es beneficioso para la salud de la piel.
3. Bayas: un "escudo" antioxidante
Las fresas, frambuesas, arándanos y moras son ricas en vitamina C y antocianinas, un poderoso grupo de antioxidantes que ayudan a inhibir los radicales libres, retardar la formación de arrugas y mejorar el brillo de la piel.
Varios estudios han demostrado que las fresas y las frambuesas son particularmente eficaces para apoyar la salud de la piel debido a su alto contenido de vitamina C.
4. Batatas: una fuente de betacaroteno para una piel sana y luminosa.
Las batatas son ricas en betacaroteno, un precursor de la vitamina A que el cuerpo convierte en retinol, ingrediente presente en la mayoría de los productos antienvejecimiento. Otros carotenoides presentes en las batatas, como el licopeno, la luteína y la zeaxantina, también ayudan a proteger la piel del daño solar.
Las batatas moradas también son ricas en antocianinas, nutrientes que se destacan por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
5. Verduras de hojas verdes: aumentan el colágeno natural.
La col rizada, las espinacas, las acelgas y la lechuga son ricas en vitamina C, vitamina K y carotenoides. La vitamina C ayuda a estimular la producción de colágeno, manteniendo la piel firme y elástica.
Los carotenoides actúan como antioxidantes, previniendo el envejecimiento prematuro. Dado que este grupo requiere grasa para una buena absorción, conviene combinarlo con aceite de oliva para maximizar sus beneficios.
6. Frutos secos y legumbres: el secreto para una piel firme
Las almendras, las nueces, las semillas de chía, las semillas de lino y los frijoles son fuentes ricas en vitamina E, grasas buenas y proteínas vegetales.
Un estudio reveló que consumir entre 30 y 60 g de almendras al día redujo significativamente la profundidad de las arrugas y mejoró el tono de la piel en mujeres de mediana edad. Además, el ALA (una forma vegetal de omega-3) presente en las semillas de lino y chía también ayuda a reducir la inflamación y a aumentar la elasticidad.
7. Tomates: aumentan el licopeno para combatir el fotoenvejecimiento.
El licopeno presente en los tomates ayuda a reducir la inflamación, el enrojecimiento de la piel y el daño oxidativo causado por los rayos UV. Los tomates cocidos contienen más licopeno que los crudos, por lo que consumir sopa o salsa de tomate también puede ser beneficioso.
Los estudios demuestran que consumir alrededor de 40-55 g de puré de tomate al día tiene un efecto significativo en la mejora de la salud de la piel.
8. Chocolate negro y cacao: ricos en flavonoles que suavizan la piel.
El chocolate negro con 70 % o más de cacao es una fuente importante de flavonoides, pero el cacao crudo es aún mejor. Beber cacao de alta calidad a diario puede aumentar la elasticidad de la piel, reducir la aspereza y la profundidad de las arrugas.
El chocolate caliente también mejora la circulación de la dermis, aportando a la piel un brillo rosado y saludable. Opte por cacao en polvo crudo o natural en lugar de cacao alcalinizado.
9. Sandía: hidrata y repone vitamina C.
La sandía no solo es rica en licopeno, sino también en vitamina C, un nutriente necesario para sintetizar colágeno y proteger la piel del sol. Su alto contenido de agua ayuda a mantener la hidratación natural de la piel. Esta es también una forma deliciosa de alcanzar el objetivo de beber 8 vasos de agua al día.
10. Té verde: purifica y protege la piel de los rayos UV.
El té verde es rico en catequinas (EGCG), un grupo de flavonoles conocidos por su capacidad para proteger la piel de los rayos UV. Las investigaciones demuestran que beber unas 4 tazas de té verde al día puede mejorar la hidratación y elasticidad de la piel, y reducir el enrojecimiento. También es una bebida beneficiosa para la circulación y la hidratación.
Fuente: https://www.vietnamplus.vn/hay-bo-sung-10-thuc-pham-nay-de-ban-trong-tre-hon-tuoi-that-post1079464.vnp
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