Comer pepinos o semillas de trigo sarraceno con regularidad antes de las comidas puede ayudar a controlar la cantidad de comida en la comida principal y al mismo tiempo aumentar la eficiencia de descomponer y quemar el exceso de grasa.
Pescado, huevos, solomillo de ternera, quinua; Las judías, las semillas… son fuentes de proteínas beneficiosas para personas con hipertensión arterial.
Las personas de mediana edad y mayores deben comer habitualmente cereales integrales, pescado fresco, huevos, leche, carne magra… para mantener la salud.
Complementar la vitamina B12, B9 o B6 a través de alimentos como carne, huevos, leche, semillas de girasol… ayuda a prevenir el encanecimiento prematuro del cabello y estimula el crecimiento del cabello negro.
Comer plátanos, sandía, cereales, verduras de hojas verdes o beber té de menta… puede tratar los dolores de cabeza provocados por el hambre y la deshidratación.
Frutas como los plátanos, los aguacates, los pimientos morrones y las lentejas contienen muchos compuestos antiinflamatorios y antioxidantes que ayudan a que el cabello crezca de forma saludable y limitan la rotura.
Las verduras crucíferas, el aceite de oliva, las bayas y las nueces son alimentos ricos en antioxidantes que pueden prevenir el envejecimiento y ayudar a mantener la piel joven.