
En medio de la creciente incertidumbre mundial en torno al comercio, Corea del Sur, una economía orientada a la exportación, busca activamente nuevos mercados fuera de sus socios tradicionales, Estados Unidos y China, según los analistas Abhishek Sharma y Shreya Mishra de la Observer Research Foundation, con sede en India (orfonline.org). En este reajuste comercial, el Sudeste Asiático se ha convertido en un socio potencial que puede abordar las preocupaciones estratégicas de Seúl.
Si bien el movimiento de diversificación comercial de Seúl comenzó hace una década, dos acontecimientos notables han acelerado el cambio: la imposición de "aranceles recíprocos" por parte de Washington y la creciente capacidad industrial de Beijing.
El riesgo de la sobredependencia
Durante muchos años, Estados Unidos y China han sido el principal y el segundo mayor socio comercial de Corea del Sur, representando entre el 39 % y el 40 % de las exportaciones totales del país. Esta dependencia económica ha expuesto graves riesgos ante el estallido de crisis geopolíticas .
Sobre el impacto de China: Corea del Sur depende en gran medida de China. En 2018, Seúl exportó bienes a China por valor de 162 000 millones de dólares, lo que representa aproximadamente el 27 % de las exportaciones totales del país. Sin embargo, cuando estalló la guerra comercial entre Estados Unidos y China en 2018, la cadena de suministro se vio gravemente afectada. Las exportaciones de Corea del Sur a China, principalmente bienes intermedios como semiconductores, disminuyeron, lo que provocó una disminución de las exportaciones totales de Corea del Sur al resto del mundo en los años siguientes.
Presión de EE. UU.: Por otro lado, EE. UU., considerado anteriormente un aliado confiable, también ha incrementado los costos comerciales con importantes aliados en Asia. En 2025, el presidente estadounidense, Donald Trump, impuso un arancel recíproco del 25 % a las importaciones procedentes de Corea del Sur, que posteriormente se redujo al 15 %. Esta medida ha supuesto un duro golpe para la industria automotriz coreana, un sector exportador clave. En concreto, la industria automotriz coreana registró una disminución del 7,5 % en sus exportaciones a EE. UU. en septiembre de 2025, en comparación con el mismo período del año anterior.
En retrospectiva, la fuerte caída del valor total de las exportaciones de Corea del Sur ha expuesto los riesgos de la dependencia económica, provocando un debate sobre las debilidades estratégicas de Seúl.
Fortalecimiento de la cooperación con el Sudeste Asiático
En medio de la incertidumbre comercial, los llamados a que Corea del Sur se diversifique y se aleje de China y Estados Unidos se han intensificado. Para reforzar su seguridad económica, Seúl está invirtiendo fuertemente en la expansión de los lazos comerciales, especialmente con los mercados del Sudeste Asiático (ASEAN).
Este cambio no es nuevo. La política estratégica de Seúl hacia la ASEAN se ha reforzado mediante una serie de acuerdos y marcos de políticas: en 2007, con la firma del Tratado de Libre Comercio Corea-ASEAN (AKFTA); en 2016, el entonces presidente Moon Jae-in lanzó la Nueva Política del Sur (NSP), que por primera vez situó al Sudeste Asiático en el centro de sus estrategias comerciales; y en 2020, con la adhesión a la Asociación Económica Integral Regional (RCEP).
Gracias a estos marcos de cooperación, las exportaciones de Seúl a la ASEAN han crecido drásticamente, logrando un crecimiento acumulado del 52% en la última década.
Sin embargo, a pesar del crecimiento, la participación de la ASEAN en las exportaciones totales de Corea del Sur nunca ha superado el 18%, significativamente inferior al 40% de Estados Unidos y China. Esta diferencia se debe en gran medida a la profunda integración económica de la ASEAN con China, el principal socio comercial del bloque.
Según las cifras comerciales de 2024, la ASEAN importa alrededor del 25% de los bienes de China (481 mil millones de dólares), mientras que las importaciones de Corea del Sur solo alcanzan el 7% de la facturación total de importaciones del bloque (128 mil millones de dólares).
Para superar esta brecha, Corea del Sur ha fortalecido la cooperación bilateral mediante la firma de TLC bilaterales con numerosos países de la región, como el reciente TLC entre Corea y Malasia. La búsqueda de TLC bilaterales indica un cambio hacia alianzas económicas más profundas y estratégicas con los estados miembros de la ASEAN, ya que suelen conducir a una mayor liberalización comercial que los TLC multilaterales.
Entre los países de la ASEAN, Vietnam es el principal socio comercial de Corea del Sur y representa más del 50% de las exportaciones totales de Seúl a la región, seguido de Singapur (16%), Malasia (9%) y Filipinas (9%) (cifras comerciales 2024).
La migración de Corea del Sur a los países del Sudeste Asiático ofrece una visión de la estrategia de diversificación de mercados de Seúl, señalan Sharma y Mishra. Sin embargo, dada la participación estratégica de China y su hegemonía económica en la región, sigue siendo cuestionable si la ASEAN puede ayudar a Corea del Sur a compensar la pérdida de sus mercados tradicionales a corto y medio plazo.
A largo plazo, para garantizar la sostenibilidad de sus exportaciones, Seúl necesita seguir invirtiendo para aumentar su participación en el comercio mundial y mejorar su competitividad. Al mismo tiempo, Corea también debería buscar oportunidades para cultivar nuevas relaciones con otros mercados en desarrollo y emergentes, especialmente aquellos que también buscan diversificar sus relaciones comerciales. India, América Latina y África podrían ser socios comerciales viables para Corea en este ámbito.
Fuente: https://baotintuc.vn/phan-tichnhan-dinh/tai-thiet-lap-thuong-mai-cua-han-quoc-da-dang-hoa-ngoai-my-va-trung-quoc-20251201184102454.htm






Kommentar (0)