China, a través de su embajador en Estados Unidos, Ta Phong, envió un mensaje a Washington de que nadie ganará en la guerra arancelaria o comercial.
En su intervención en el banquete del Consejo Empresarial Estados Unidos-China celebrado en Shanghai el 7 de noviembre, el Sr. Ta Phong (Xie Feng) enfatizó que "nadie es el ganador" en las guerras arancelarias, comerciales o científicas y tecnológicas.
El embajador chino en Estados Unidos dijo que las diferencias entre los dos países deberían convertirse en una fuerza impulsora para el intercambio y el aprendizaje mutuos, en lugar de "una excusa para la negación y la confrontación". También afirmó que los éxitos de cada país son oportunidades para que el otro país se desarrolle más.
El embajador Ta también recordó que muchas empresas estadounidenses operan en China, de las cuales alrededor del 60% de las nuevas tiendas McDonald's abiertas el año pasado estaban en China.
Shanghai es actualmente la única ciudad por encima mundo Hay más de 1.000 cafeterías Starbucks.
“Cuantos más casos exitosos de cooperación en la que todos ganen, mejor para ambos países”, enfatizó. China y Estados Unidos pueden lograr grandes logros juntos a través de la cooperación, y la lista de cooperación debe ampliarse".
Ta Phong no mencionó directamente las elecciones ni al presidente electo Donald Trump, quien impuso miles de millones de dólares en aranceles a productos chinos antes de que los dos países acordaran reconciliarse en enero de 1.
Con el regreso de Trump a la Casa Blanca, existen muchas preocupaciones de que Estados Unidos y China tengan una nueva confrontación en muchos campos.
Mientras tanto, la economía de China enfrenta muchos desafíos después de que el crecimiento se desaceleró al 6% en 2019, el nivel más débil en casi 30 años, debido al impacto de la guerra comercial con Estados Unidos.
En 2024, China fija un modesto objetivo de crecimiento de alrededor del 5%. Esto pondrá al país en desventaja si las tensiones comerciales vuelven a estallar después de que Trump asuma el cargo en enero de 1.
Durante la campaña electoral, Trump se comprometió a imponer un impuesto del 60% a las importaciones procedentes de China, mucho más alto que el tipo impositivo del 7,5 al 25% durante su primer mandato.
Los analistas dicen que China estará lista para responder si ocurre una nueva guerra comercial. Joe Mazur, analista senior de Trivium China Consulting Company en Beijing, comentó: "Incluso si las relaciones entre Estados Unidos y China se calientan repentinamente, Beijing seguirá priorizando la autonomía y la seguridad económica".
“Si se aplican aranceles elevados, seremos testigos de fuertes represalias por parte de China. "Pekín puede pensar que una actitud suave no trae ningún beneficio, y una respuesta fuerte puede hacer que Estados Unidos reconsidere la presión económica sobre el país", dijo Mazur.
Julian Evans-Pritchard, jefe de economía de China en la firma independiente de investigación económica Capital Economics, predijo: “Estimamos que incluso si los aranceles estadounidenses sobre los productos chinos aumentan al 60%, el impacto directo sobre el PIB de China es inferior al 1%. .
Fuente: https://tuoitre.vn/trung-quoc-noi-ve-hop-tac-sau-khi-ong-trump-dac-cu-20241108155559884.htm