La salida de Rashford del Manchester United, algo en lo que no muchos aficionados habían pensado antes. |
Las últimas dos semanas en Carrington han sido una tragicomedia. Ruben Amorim sale del campo de entrenamiento del Manchester United en coche, y Marcus Rashford aparece instantes después. La imagen refleja con crudeza la situación del astro inglés: marginado, aislado y la cara visible de los marginados del club.
Cuesta creer que la historia de Rashford y el MU haya terminado así. Considerado en su día el nuevo símbolo de los "Diablos Rojos", Rashford ya no está en los planes de Amorim.
La relación entre ambos ha sido tensa durante mucho tiempo. Rashford declaró en diciembre que estaba "listo para un nuevo desafío" solo unos días después de su última aparición con el club, y Amorim declaró públicamente en enero que "preferiría tener un entrenador de porteros de 63 años que poner a Rashford de titular".
Una cesión al Aston Villa fue una vía de escape temporal para todos. Rashford tuvo un buen desempeño en los Midlands, demostrando su valía y consiguiendo una convocatoria para la selección inglesa bajo el mando de Thomas Tuchel. Pero su corazón seguía puesto en el Barcelona, el destino que siempre había deseado.
Este verano, Rashford regresó a Carrington tras una concentración privada en Marbella. Su presencia creó inmediatamente un ambiente incómodo. El mensaje del Manchester United fue claro: aunque Rashford estaba dispuesto a entrenar, estaba entre los cinco jugadores que ya no entrenaban con el primer equipo.
La historia de "evitar" a Amorim con entrenamientos extra es como un juego de las escondidas, mostrando que el futuro entre ambos equipos ha terminado.
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Aston Villa es sólo un destino temporal para Rashford. |
Lo irónico es que el Manchester United está gastando 130 millones de libras en Matheus Cunha y Bryan Mbeumo, mientras que Rashford, Garnacho, Sancho y Antony —cuatro jugadores que en su día valieron un total de 330 millones de libras— están siendo marginados. Para Rashford, en particular, este es un declive inaceptable. Antaño era la joya de la cantera, el orgullo de la afición, y ganaba la friolera de 315.000 libras a la semana.
El problema no es solo su forma física. Rashford parece haber perdido el amor por el balón en Old Trafford, perdiendo la motivación que lo impulsó en la temporada 2022/23. El periodo actual, que debería haber sido el mejor de su carrera, se ha convertido en una batalla para reencontrarse.
Sin embargo, el tiempo corre a favor de Rashford. Aún no ha cumplido los 28 años y aún vive sus mejores años como delantero. Barcelona, un escenario más grande y ambicioso, podría ser el lugar para revitalizar su carrera. Si el Barça logra ayudar a Rashford a encontrar su inspiración y cerrar el acuerdo por 40 millones de libras, será una auténtica ganga.
El exdelantero del Manchester United, Teddy Sheringham, dijo recientemente con sarcasmo: "Pasar del Manchester United al Barça fue un paso adelante que no merecía".
Sin embargo, dada la situación actual, el Barcelona está claramente un nivel por encima del Manchester United. Rashford tiene la oportunidad de jugar junto a talentos como Lamine Yamal, consolidarse y recuperar su lugar en la selección inglesa de cara al Mundial de 2026.
Quién sabe, si Amorim no logra darle la vuelta al Manchester United, el próximo entrenador podría querer darle una segunda oportunidad a Rashford. Aún le quedan muchos capítulos por escribir en su carrera, pero es hora de dejar atrás la decepción de Old Trafford y emprender un nuevo camino.
Fuente: https://znews.vn/doan-ket-buon-cua-rashford-post1570072.html
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