Valles como Na Ka, Mu Nau, Phieng Canh... son destinos favoritos, de los cuales Na Ka es conocido como el paraíso de los ciruelos en flor blanca.
Toda la zona estaba cubierta de flores blancas, cuyos delicados pétalos brillaban a la luz del sol. Los tejados aparecían y desaparecían en los vastos jardines de ciruelos blancos.
En aquella época, solía buscar a los niños. Sin ellos, el paisaje era un poco más monótono.
Durante la temporada de floración de los ciruelos, fuera del horario de clases, los niños de Na Ka visten sus vestidos y faldas más bonitos y llevan cestas de flores para dar la bienvenida a los turistas .
Se abrían paso a través del jardín, retozando en los senderos bordeados de flores de ciruelo de un blanco puro, como manchas de color en movimiento que iluminaban las montañas y los bosques.
Si todavía estás confundido, no dudes en preguntar a los niños, ellos te mostrarán el jardín de ciruelos más floreciente con los mejores ángulos para sacar fotos.
Los niños son amables embajadores del turismo e inspiración para los fotógrafos. Bajo los arcos de flores blancas entrelazadas, los colores verde, rojo y amarillo de los trajes infantiles le dan a la escena una vida inusualmente animada.
Revista Heritage
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