A lo lejos, bandadas de cigüeñas blancas surcan el vasto cielo, descendiendo ocasionalmente en picado sobre los campos recién arados en busca de alimento. Se alinean ordenadamente, buscando alimento con diligencia, ayudando a los agricultores a eliminar las plagas que destruyen las cosechas. En los campos aún cubiertos de rocío, la imagen de agricultores con las manos y los pies embarrados resulta familiar. Algunos llevan azadas, otros pulverizadores más pesados que sus pequeñas figuras, todos comenzando apresuradamente una nueva jornada de trabajo. El canto de los pájaros se mezcla con el sonido de las risas, creando la vibrante armonía de la madrugada. Todo el campo es como una apacible pintura rural, donde la naturaleza y la gente se funden en un ritmo de vida simple pero vibrante.
La mañana en el campo no sólo es hermosa, sino que también trae una sensación de relajación y dulzura, haciendo que la gente ame aún más su tierra natal.
HA PHUC
Fuente: https://baoangiang.com.vn/buoi-som-binh-di-tren-dong-que-a418683.html
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