La KFOR, la misiónde paz de la OTAN en Kosovo, condenó la violencia de los manifestantes. «Al contener a los extremistas entre la multitud, varios soldados de la KFOR sufrieron ataques no provocados, sufriendo quemaduras y fracturas», declara el comunicado.
Manifestantes serbios se enfrentan con las fuerzas de paz de la OTAN en la ciudad de Zvecan, Kosovo. Foto: Reuters
El ministro de Defensa húngaro, Kristof Szalay-Bobrovniczky, anunció que siete soldados húngaros gravemente heridos serían enviados a casa para recibir tratamiento. Varios soldados italianos también resultaron heridos.
«Lo que está sucediendo es completamente inaceptable e irresponsable», declaró la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en un comunicado. «Es importante que todas las partes reduzcan la tensión de inmediato».
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha puesto a su ejército en alerta máxima de combate. Afirmó que 52 serbios residentes en Kosovo resultaron heridos en los enfrentamientos.
El ministro de Defensa serbio, Milos Vučević, dijo a los periodistas que Vučić, comandante en jefe de las fuerzas armadas serbias, había elevado la preparación para el combate del ejército al nivel más alto.
"El Jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Serbia ha emitido instrucciones adicionales sobre el despliegue de unidades militares en lugares específicos y designados", dijo Vucevic.
El presidente de Kosovo, Vjosa Osmani, acusa a su homólogo serbio de desestabilizar Kosovo. Mientras tanto, el Sr. Vucic ha contraacusado al primer ministro kosovar, Albin Kurti, de generar tensiones. Ha instado a los serbios de Kosovo a evitar enfrentamientos con las tropas de la OTAN.
Las tensiones han aumentado después de que los alcaldes de etnia albanesa, que representan el 90 por ciento de la población de Kosovo, asumieran el cargo en el norte del país, de mayoría serbia.
En Zvecan, una de las localidades donde se produjeron los enfrentamientos, la policía de Kosovo disparó gases lacrimógenos contra los manifestantes que intentaron romper las barreras de seguridad y asaltar el ayuntamiento. Los manifestantes lanzaron gases lacrimógenos y granadas aturdidoras contra las tropas de la OTAN y dañaron vehículos de la OTAN.
En Leposavic, cerca de la frontera con Serbia, las fuerzas de paz estadounidenses tuvieron que colocar alambre de púas alrededor del ayuntamiento para impedir que los manifestantes lo asaltaran.
Hoang Nam (según Reuters, AP)
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