El 24 de noviembre entró en vigor un alto el fuego humanitario de cuatro días en la Franja de Gaza entre Israel y las fuerzas de Hamás.
Traslado de heridos tras los bombardeos israelíes a la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 22 de noviembre de 2023. (Foto: THX/TTXVN)
Con el alto el fuego, Israel puede rescatar rehenes y calmar a la opinión pública, mientras que Hamás tiene más tiempo para reorganizar sus fuerzas.
El gobierno israelí anunció un alto el fuego de cuatro días a cambio de la liberación de unos 50 rehenes de la Franja de Gaza. Hamás también confirmó el "alto el fuego humanitario" y añadió que 150 palestinos serían liberados de prisiones israelíes en virtud del acuerdo.
La medida se considera un avance importante que podría ayudar a aliviar las tensiones tras más de seis semanas de combates. También podría ayudar a Israel a aliviar la creciente presión nacional e internacional, según Jeffrey Fleishman y Laura King, dos analistas de Los Angeles Times.
Qatar es el mediador del alto el fuego y el intercambio de rehenes. Un centro de mando en Doha, la capital qatarí, supervisará la implementación del alto el fuego y la liberación de los rehenes israelíes. Durante este periodo, también se enviará ayuda adicional a la Franja de Gaza.
El primer ministro Benjamin Netanyahu se ha enfrentado a crecientes riesgos políticos en las últimas semanas, ya que las familias de las personas secuestradas han criticado al gobierno israelí por no hacer lo suficiente para rescatar a sus seres queridos.
El ex primer ministro Ehud Barak, rival político de Netanyahu, afirmó que la prioridad principal del jefe de gobierno era proteger a los ciudadanos. Aseguró que Netanyahu no lo hizo durante la incursión de Hamás en territorio israelí el 7 de octubre.
Los índices de aprobación de Netanyahu están cayendo. Una nueva encuesta de la Universidad Bar Ilan muestra que menos del 4% de los judíos israelíes consideran a Netanyahu confiable en cuanto a información sobre la guerra.
John Lyons, analista de ABC News en Australia, dijo que el impulso político detrás del alto el fuego recae en el primer ministro Netanyahu, quien está “luchando por su supervivencia política”.
Tel Aviv claramente quiere que el ejército israelí pueda localizar y rescatar a los rehenes sin tener que negociar con Hamás ni liberar a prisioneros palestinos. Sin embargo, los ministros israelíes saben que no les queda otra opción que aceptar un acuerdo con Hamás.
"Este acuerdo es la única opción disponible para rescatar a los rehenes", dijo David Horovitz, analista del Times of Israel.
El nuevo acuerdo de alto el fuego no solo goza de amplio apoyo entre el pueblo israelí, sino que también goza de un alto nivel de consenso en el gabinete de guerra. Incluso algunos de los sectores más radicales del gobierno actual, como el Partido Sionista, consideran que vale la pena implementarlo.
La indignación internacional por la campaña de Israel contra Hamás también ha crecido en las últimas semanas, a medida que las víctimas se han disparado, las instalaciones médicas han sido destruidas y muchos niños palestinos se han convertido en víctimas del conflicto.
Compilado por NGUYEN TAN
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