El problema es el siguiente: gane o pierda, la directiva del Bayern Múnich no sabe qué hacer con el entrenador Thomas Tuchel.
El Bayern de Múnich (izquierda) está desorientado antes del partido de vuelta contra la Lazio.
Inmediatamente después de perder 0-1 ante la Lazio en la ida de los octavos de final de la Champions League, el Bayern de Múnich anunció oficialmente su decisión de despedir a Thomas Tuchel al final de la temporada. Esta extraña decisión ha puesto al Bayern en una situación irónica. ¿De verdad necesita Tuchel devanarse los sesos y perder el sueño buscando una estrategia adecuada para remontar la desventaja contra la Lazio en la vuelta? Y una vez que el entrenador ya no tenga motivación para trabajar (en teoría), ¿de verdad necesitan los jugadores luchar a muerte?
Esta es la dura realidad del fútbol profesional, no meras especulaciones. Nadie quiere perder. Pero los jugadores y la directiva del Bayern están considerando una serie de contratos. ¿A quién podría vender la directiva este próximo verano? ¿Qué jugadores quieren irse y cuáles quieren renovar sus contratos, incluso si eso significa aceptar una reducción salarial? Todo gira en torno al puesto de entrenador (porque los jugadores no hablarían de su futuro con Tuchel sabiendo que lo despedirían de todos modos). La última polémica: los comentaristas sugieren que el Bayern debería despedir inmediatamente a Tuchel (antes de lo esperado) si la Lazio los elimina de la Champions League. Pero fuentes cercanas al club dicen dos cosas: el Bayern mantendrá a Tuchel si pierde contra la Lazio, pero lo despedirá al final de la temporada, independientemente del resultado final de la Champions League.
Si el Bayern acaba sufriendo una humillante derrota en todas las competiciones de esta temporada, es difícil determinar si se debe a un fallo de Tuchel o de la directiva del club. Desde la expansión de la Champions League (permitiendo la participación de más de un país), el Bayern nunca ha terminado una temporada sin un título de liga nacional, ni sin alcanzar los cuartos de final de ninguna otra competición. Se avecina un desastre histórico (en términos de resultados) esta temporada.
Perder por un gol en la ida no fue un gran problema. Tuchel incluso era considerado un entrenador "especialista en la Champions League". Incluso el PSG, un equipo con poca reputación en esta competición tan especializada, logró llegar a la final, por lo que su talento era indudable. Tuchel luego guió al Chelsea hacia el título de la Champions League al vencer a los dos equipos más fuertes de la competición en los últimos años: el Real Madrid y el Manchester City. El problema es la situación actual, como se mencionó: es demasiado incierta tanto para Tuchel como para el Bayern de Múnich.
En sus siete últimos partidos de eliminatoria en la Champions League, el Bayern no ha logrado remontar la desventaja en la vuelta. Esta temporada ha sido afortunada, ya que la UEFA ya no aplica la regla de los goles fuera de casa. De lo contrario, una desventaja de 0-1 en la ida habría sido mucho más grave para el Bayern (con la antigua regla, una victoria por 2-1 o 3-2 habría supuesto la eliminación). Sin embargo, el Bayern se mantiene fuerte en casa. Sus derrotas ante el Leverkusen y el Bochum, y su empate contra el Friburgo, que lo dejó a 10 puntos del Leverkusen en la Bundesliga, fueron todos fuera de casa. La derrota en la ida ante la Lazio también fue un ejemplo. En su estadio, el Allianz Arena, el Bayern ha marcado 40 goles en sus últimos 12 partidos entre todas las competiciones.
La Lazio se encuentra actualmente en la mitad de la tabla de la Serie A. Solo ha superado la fase de grupos de la Champions League en dos ocasiones y siempre ha sido eliminada en la primera ronda eliminatoria. Pero contra un Bayern de Múnich en apuros, ¡el equipo de Maurizio Sarri tiene la oportunidad de dar la sorpresa!
Calendario de partidos
3:00 AM del 6 de marzo:
Bayern Múnich - Lazio
Real Sociedad - PSG
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