Según la agencia de noticias Rappler, en la mañana del 10 de febrero se produjo un terremoto en Mindanao, Filipinas. Aunque no hubo daños, los expertos predicen que habrá muchas réplicas tras el terremoto.
El Centro Alemán de Investigación Geocientífica (GFZ) dijo que el terremoto tuvo una magnitud de 5,6, mientras que la agencia sismológica filipina evaluó el terremoto con una magnitud de 5,9.
El terremoto interrumpió las operaciones de búsqueda y rescate de decenas de personas desaparecidas en un deslizamiento de tierra provocado por fuertes lluvias prolongadas en la localidad de Maco, en la provincia sureña de Dávao de Oro. El deslizamiento de tierra se produjo la tarde del 6 de febrero frente a una mina de oro. Hasta la fecha, el número de muertos es 2, 28 desaparecidos y 77 heridos.
En las últimas semanas, fuertes lluvias han caído continuamente en muchas zonas de la isla de Mindanao, incluida la provincia filipina de Davao de Oro, provocando graves inundaciones y deslizamientos de tierra, obligando a decenas de miles de personas a refugiarse en campos de evacuación.
EL SUR