El doctor especialista 2 Dinh Tran Ngoc Mai, del Departamento de Nutrición y Dietética del Hospital Universitario de Medicina y Farmacia de Ciudad Ho Chi Minh, explicó que el café contiene cafeína y compuestos vegetales como polifenoles y taninos, que pueden interactuar con muchos fármacos alterando su absorción, metabolismo o excreción en el organismo. Esto no significa que los consumidores de drogas deban dejar el café, sino que deben comprender los riesgos para consumirlos de forma segura y eficaz.
El café contiene cafeína y compuestos vegetales como polifenoles y taninos, que tienen el potencial de interactuar con muchos medicamentos.
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Suplementos de hierro y café
Un ejemplo común son los suplementos de hierro, que suelen utilizarse para tratar la anemia ferropénica. Al tomarlos con café o en la hora siguiente a la toma, la absorción de hierro puede reducirse entre un 40 % y un 80 %.
La razón es que los polifenoles y taninos del café se combinan con los iones de hierro para formar complejos insolubles, lo que reduce la biodisponibilidad del fármaco.
Además del café, alimentos como el té, el cacao, el chocolate negro, el vino tinto e incluso algunos cereales integrales pueden interferir de forma similar con la absorción de hierro. En este caso, la Sociedad Americana de Hematología (ASH) recomienda tomar hierro en ayunas y con al menos una o dos horas de diferencia con el café para optimizar la eficacia del tratamiento.
Antibióticos y café
Otro grupo de medicamentos susceptibles a interacciones son los antibióticos quinolónicos, como la ciprofloxacina y la norfloxacina, explicó el Dr. Ngoc Mai. Estos medicamentos pueden verse afectados de dos maneras: por un lado, la cafeína ralentiza su descomposición en el hígado, lo que aumenta el riesgo de efectos secundarios como inquietud, ansiedad, temblores en las manos o insomnio; por otro lado, el propio medicamento ralentiza el metabolismo de la cafeína, lo que provoca una mayor acumulación de cafeína en el organismo. Esto es más evidente en personas mayores o con enfermedades hepáticas. Las directrices de la Sociedad Americana de Farmacología Clínica (ASHP) recomiendan limitar el consumo de bebidas con cafeína durante el tratamiento con estos medicamentos para minimizar las interacciones.
Debe informar de forma proactiva a su médico sobre sus hábitos diarios de consumo de café.
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Además, la levotiroxina, una hormona tiroidea sintética comúnmente utilizada para tratar el hipotiroidismo, también es un fármaco muy sensible a los alimentos y bebidas. El café puede reducir significativamente la absorción intestinal de levotiroxina, lo que impide que los pacientes alcancen el efecto del tratamiento incluso tomando la dosis correcta. Según las recomendaciones de la Sociedad Americana de Endocrinología, el fármaco debe tomarse por la mañana en ayunas, con agua filtrada, al menos 30-60 minutos antes de las comidas y del café.
Antidepresivos y café
Según el Dr. Ngoc Mai, otros medicamentos que se deben tener en cuenta son los medicamentos para la osteoporosis, como el alendronato y el risedronato, que tienen una absorción muy pobre cuando se toman con alimentos o café, lo que reduce su eficacia en la prevención de fracturas óseas.
Además, ciertos antidepresivos, medicamentos para la enfermedad de Parkinson (como la levodopa) o píldoras anticonceptivas también pueden verse afectados por el uso concomitante con café, alterando los niveles sanguíneos de diferentes maneras.
El Dr. Ngoc Mai aconseja que las personas que tienen el hábito de tomar de 1 a 2 tazas de café al día informen a su médico sobre este hábito. Cada medicamento tiene su propio tiempo óptimo de absorción y la forma más sencilla es tomarlo con agua, al menos 1 hora después del café, o bien, seguir las instrucciones específicas del médico o farmacéutico. Este pequeño ajuste puede marcar una gran diferencia en la eficacia del tratamiento y la seguridad del paciente.
Fuente: https://thanhnien.vn/khong-the-bo-cu-ca-phe-uong-thuoc-sao-cho-dung-185250523095514218.htm
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