En los arrozales en terrazas, suavemente curvados, que serpentean por la ladera de la montaña, la suave brisa sopla, haciendo que los pesados tallos de arroz se balanceen como si saludaran. Los campos tienen las puntas rojas, los granos rebosan de leche, desprendiendo un aroma rico y fragante, un aroma a calidez y abundancia.
Entre el amarillo brillante se intercala el rojo intenso de los trajes tradicionales del pueblo hmong, un vibrante reflejo en medio de la apacible escena rural. Los trajes tradicionales con coloridos estampados no solo son una imagen típica de la región montañosa, sino que también reflejan el orgullo y el fuerte apego a las raíces culturales.

En las tierras altas, la temporada de cosecha de arroz brinda a los turistas la oportunidadde explorar la belleza de la cultura indígena. La temporada de cosecha aquí es atractiva por su rusticidad, naturaleza prístina y rica identidad montañosa. Los turistas pueden detenerse en un pequeño pueblo en la ladera, caminar por los senderos que bordean los campos en terrazas, escuchar el agradable sonido de las hoces, observar las ágiles manos de los agricultores cosechando cada puñado de arroz o simplemente detenerse entre las interminables olas doradas para sentir el aliento de la cosecha extendiéndose por el espacio.

En muchas aldeas hmong, la temporada de cosecha es una fiesta del trabajo y también una época de amor comunitario. La gente se invita a ir al campo, trabajar juntos y compartir las tareas. El ambiente de la cosecha es animado y ajetreado, pero a la vez muy cálido. Los adultos cortan el arroz, los ancianos recogen los manojos, los niños acompañan a sus madres para ayudar a recoger el arroz y la paja... Todo ello crea una vívida imagen del trabajo agrícola. Las risas frescas y las palabras amigables que resuenan en la ladera de la montaña hacen la escena aún más íntima y familiar.

Todo el trabajo en el campo se realiza a mano. Cada manojo de arroz se cosecha con una hoz, se ata con cuerdas de paja seca y se transporta de vuelta al pueblo en cestas de bambú tejidas a mano. Cada movimiento, cada herramienta, cada simple sonido contribuye a recrear un espacio de la cultura tradicional del trabajo agrícola . Es esta simplicidad la que hace de la temporada de cosecha un momento ideal para desarrollar el turismo agrícola-cultural con la participación directa de los turistas.

Al llegar a Tuyen Quang en la temporada dorada, los turistas no solo pueden hacer turismo y tomar fotografías, sino también sumergirse en la vida de la gente, cosechando, trillando, hirviendo y cocinando arroz en los campos. El color amarillo del arroz, el rojo de la ropa y la alegre risa de la temporada de cosecha… todo se funde en una vibrante y animada armonía.
La temporada de cosecha en las tierras altas no es solo la temporada de cosecha, sino también la época de la comunicación entre la naturaleza y las personas. Es entonces cuando Tuyen Quang, como en muchas otras tierras altas, se vuelve más hermoso del año. Cuando el color amarillo comienza a extenderse por las tierras altas, también marca el comienzo de un fascinante y cautivador viaje de cosecha.
Fuente: https://nhandan.vn/ruc-ro-mua-vang-vung-cao-post884748.html
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