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La presión académica y la falta de conexión en el entorno escolar se encuentran entre las causas de la inestabilidad de la salud mental en los estudiantes.
Los principales factores de riesgo para la salud mental de los adolescentes en Vietnam incluyen diversos factores, como la falta de conexión en la escuela, la presión académica, el acoso escolar y el estrés social. El carácter competitivo del currículo de secundaria y preparatoria somete a los estudiantes a una gran presión, con una gran cantidad de conocimientos que aprender y poca participación en cursos activos para mejorar la salud mental y el desarrollo integral, como habilidades para la vida, arte y deportes. Algunos estudiantes manifestaron sentirse asustados, ansiosos, deprimidos y tristes, la mayoría de los cuales estaban relacionados con el rendimiento académico y sus pensamientos sobre el futuro.
Falta de conexión en el entorno de aprendizaje
Según UNICEF, alrededor del 26% de los estudiantes vietnamitas presentan un riesgo moderado o alto de padecer problemas de salud mental. Un estudio de UNICEF reveló que el 12% de los niños, niñas y adolescentes (más de 3 millones) padecen problemas de salud mental y necesitan servicios de apoyo. Al igual que ocurre a nivel mundial, los niños vietnamitas presentan tasas más altas de trastornos de conducta, mientras que las niñas presentan más problemas emocionales, como ansiedad y depresión.
El riesgo de suicidio entre los adolescentes relacionado con la depresión y los problemas de salud mental es una preocupación importante. Un estudio de UNICEF muestra que el 21,4 % de las adolescentes y el 7,9 % de los adolescentes han reportado pensamientos suicidas, mientras que otro estudio indicó que el 5,8 % de los adolescentes han intentado suicidarse. Sin embargo, pocos adolescentes con problemas de salud mental reciben tratamiento o apoyo, en parte debido a la falta de comprensión de los problemas de salud mental y a la escasez de recursos y servicios.
Los principales factores de riesgo para la salud mental de los adolescentes vietnamitas incluyen diversos factores, como la falta de conexión escolar, la presión académica, el acoso escolar y el estrés social. El carácter competitivo del currículo de secundaria y preparatoria en Vietnam somete a los estudiantes a una gran presión, con una gran cantidad de conocimientos que aprender y poca participación en cursos activos para promover la salud mental y el desarrollo integral, como habilidades para la vida, arte y deportes. Algunos estudiantes reportaron sentimientos de miedo, ansiedad, depresión y tristeza, la mayoría relacionados con el rendimiento académico y las ideas sobre el futuro.
Los problemas de salud mental también se relacionan con factores del entorno escolar, como la percepción de seguridad y el compromiso del estudiante con la escuela. Los psicólogos han descubierto que los adolescentes que participan activamente en la escuela tienen menos probabilidades de presentar síntomas psicológicos, mientras que quienes participan menos —a menudo las niñas— tienen más probabilidades de tener problemas de salud mental. Lo preocupante es que algunos niños no se sienten cómodos acudiendo a los profesores en busca de apoyo académico o psicológico. Como resultado, muchos niños sufren acoso escolar, pero no todos los profesores lo reconocen.
Los profesores deben reconocer las señales de angustia de los estudiantes.
De hecho, uno de los factores que afecta negativamente la salud mental de los estudiantes es la falta de conocimiento sobre salud mental, tanto de los propios estudiantes como de sus familias y docentes. Actualmente, muchas escuelas aún carecen de salas de orientación escolar especializadas y de orientadores debidamente capacitados. También se desaprovechan oportunidades para apoyar e identificar problemas de salud mental en los estudiantes, en parte debido a la falta de conocimiento.
Los maestros, directores y consejos escolares reconocen la importancia de las relaciones entre docentes y estudiantes para identificar problemas de salud mental y apoyar a los estudiantes, pero su implementación se ve obstaculizada por factores como clases de gran tamaño, programas de capacitación docente que no ponen énfasis en el tema y una falta de prioridad en el currículo.
Para promover la salud mental y proteger a los niños vulnerables, las escuelas deben promover relaciones positivas entre docentes y alumnos, reducir el estrés académico, fortalecer la conexión de los alumnos con la escuela y construir relaciones positivas entre ellos. Los padres también deben recibir apoyo para conectar con sus hijos. Los programas de formación y asesoramiento deben compartir conocimientos sobre salud, nutrición y desarrollo infantil, fomentar el aprendizaje familiar y ofrecer formación en habilidades a los padres.
Es necesario concienciar a la sociedad para promover una salud mental positiva, animando a niños y adolescentes a contactar con amigos, padres y profesionales cuando experimenten dificultades de salud mental. Padres, maestros y adultos también deben saber cómo identificar las señales de alerta que indican que un niño o adolescente podría estar lidiando con problemas de salud mental.
Es necesario desarrollar recursos humanos con amplia experiencia en salud mental estudiantil e integrar contenidos formativos sobre salud mental y psicología para estudiantes menores de edad en los programas generales de formación docente universitaria. El Ministerio de Educación y Formación también necesita ofrecer cursos para docentes que profundicen en los síntomas de la salud mental, detecten signos tempranos y señales sutiles de problemas mentales o trauma psicológico. El profesorado debe ser capaz de detectar los síntomas tempranos de la salud mental para informar a las familias y encontrar soluciones.
La adolescencia es un período crítico que marca la transición de la infancia a la edad adulta. La salud mental y el desarrollo integral son importantes durante este período, ya que los jóvenes enfrentan desafíos de desarrollo, académicos y sociales que son clave para su éxito, salud y desarrollo integral.
Para los adolescentes, la escuela es uno de los entornos psicosociales más importantes, ya que ofrece tanto riesgos como oportunidades para promover y apoyar la salud mental. Establecer servicios de salud mental en la escuela es fundamental para apoyar la salud mental de los adolescentes y abordar los factores de riesgo relacionados con la escuela.
Los principales factores de riesgo para la salud mental de los adolescentes en Vietnam incluyen diversos factores, como la falta de conexión en la escuela, la presión académica, el acoso escolar y el estrés social. El carácter competitivo del currículo de secundaria y preparatoria somete a los estudiantes a una gran presión, con una gran cantidad de conocimientos que aprender y poca participación en cursos activos para mejorar la salud mental y el desarrollo integral, como habilidades para la vida, arte y deportes. Algunos estudiantes manifestaron sentirse asustados, ansiosos, deprimidos y tristes, la mayoría de los cuales estaban relacionados con el rendimiento académico y sus pensamientos sobre el futuro. |
Hoang Huong
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