Kathryn Rawlins es profesora de secundaria en Atherstone, Warwickshire, en el oeste de Inglaterra. Según cuenta, hace 30 años, cuando tenía 15, de camino a casa después de la escuela, Kathryn Rawlins y dos amigos encontraron accidentalmente un objeto extraño semienterrado.
Los tres decidieron desenterrar el objeto. Una amiga de Kathryn confirmó que era un jarrón de hierro común y corriente. Así que Kathryn Rawlins se lo llevó a casa y lo usó a menudo como florero.
Kathryn Rawlins declaró al Dailymail: « Dos amigos y yo tardamos unos días en desenterrar esta olla de hierro. Uno de ellos le quitó la tapa. La conservé durante 30 años».
Kathryn y sus amigos encontraron la extraña jarra de hierro camino a casa desde la escuela. (Foto: Dailymail)
Kathryn usó este jarrón desde la secundaria hasta la universidad, cuando se casó y tuvo hijos. Un día, Kathryn vio por casualidad un documental sobre la Primera Guerra Mundial en la televisión. En él, un vídeo de las bombas lanzadas por aviones alemanes sobre Coventry le llamó la atención. Kathryn se sorprendió al darse cuenta de que había estado usando una bomba sin explotar para colocar flores.
Kathryn llamó rápidamente a la policía y describió la bomba con detalle. La bomba medía unos 30 cm de largo y 8 cm de ancho, tenía una punta cónica, era desmontable, tenía letras grabadas en el exterior y era especialmente pesada. Al mismo tiempo, Kathryn tomó una foto del "florero" y se la envió a la policía. Poco después, expertos en desactivación de bombas acudieron a su casa. Retiraron todos los explosivos del interior y le devolvieron la carcasa vacía.
Resultó que el jarrón de hierro de Kathryn era una bomba sin explotar. (Foto: Dailymail)
La policía dijo que si la bomba hubiera explotado, habría volado la casa de Kathryn y habría matado a cualquiera en un radio de 20 metros. Afortunadamente, Kathryn y quienes la rodean no han sufrido ningún incidente desafortunado en los últimos 30 años.
Quoc Thai (Fuente: Dailymail)
[anuncio_2]
Fuente
Kommentar (0)