Según el periodista Riath Al-Samarrai del Daily Mail, la decisión de la FIFA de celebrar el Mundial de 2030 en seis países es como un castigo tanto para los jugadores como para los aficionados.
"Esto dice algo sobre la locura persistente del presidente de la FIFA Gianni Infantino y sus asociados, más que la idea de segunda categoría de Jürgen Klopp de volver a jugar contra Liverpool y Tottenham", comentó Al-Samarrai después de que la FIFA anunciara sus planes de celebrar la Copa del Mundo de 2030 en Marruecos, Portugal y España, pero con los tres primeros partidos jugándose en Uruguay, Argentina y Paraguay para conmemorar el centenario del torneo.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
Según Al-Samarrai, la FIFA ha ignorado los intereses de los aficionados y los jugadores. Un viaje de ida y vuelta desde Europa o el norte de África a Buenos Aires, Argentina, puede tomar 19.312 km (12.000 millas), costar mucho dinero y arruinar el ambiente que se crea en un país anfitrión de un Mundial.
"Es una decisión extraña e ilógica, y por lo tanto, cabe preguntarse por qué. Dada la mala reputación de la FIFA, forjada a través de tantos escándalos, se puede especular sobre sus motivos", dijo Al-Samarrai, refiriéndose al carácter mercenario del organismo rector del fútbol mundial .
Cuando anunció ayer los planes para el Mundial 2030, Infantino afirmó que, en un mundo dividido, la FIFA y el fútbol estaban unidos. Sin embargo, Al-Samarrai se mostró escéptico ante esta afirmación. De hecho, la FIFA busca maneras de aumentar los torneos para obtener más ingresos.
Tras aumentar a 48 el número de equipos participantes en el Mundial de 2026, la FIFA anunció a finales de 2022 un cambio en el formato del Mundial de Clubes, aumentando el número de equipos participantes de siete a 32, similar al Mundial de selecciones nacionales. En consecuencia, los 32 clubes participantes en el Mundial de Clubes de la FIFA, vigente a partir de 2025, se dividirán en ocho grupos de cuatro equipos cada uno, y los dos primeros de cada grupo avanzarán a la ronda eliminatoria.
Jamie Carragher ha criticado a la FIFA por presentar otra idea "ridícula" tras la propuesta de celebrar el Mundial cada dos años. Quiere que los clubes europeos boicoteen el nuevo torneo. "Los jugadores necesitan un respiro. Los están tratando como ganado. La FIFA odia la Champions League y quiere algo similar", añadió el exdefensa del Liverpool.
Desde el comienzo de la temporada, los mejores entrenadores de la Premier League como Mikel Arteta, Erik ten Hag, Jurgen Klopp y Pep Guardiola se han quejado continuamente del ajustado calendario de partidos tanto a nivel de clubes como de selecciones nacionales, lo que provoca lesiones a muchos jugadores.
En él, Guardiola enfatizó que la única manera de detener esto es que los jugadores se "rebelen" y exijan sus derechos. "Cualquier idea de reducir el número de partidos de los jugadores sería genial", dijo Guardiola. "Pero nada cambiará. Solo hay una solución: que los jugadores decidan por sí mismos. Para detener a las federaciones, hay que cambiar algo. Tras estas declaraciones, quizá la FIFA y la UEFA reaccionen. Sin Guardiola, el fútbol seguirá adelante. Pero sin los jugadores, no puede".
Hong Duy
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