Según los expertos, la diferencia entre generaciones de consolas de videojuegos es cada vez más difícil de percibir, especialmente entre resoluciones 4K y 8K. Esto hace que muchos jugadores ya no estén interesados en actualizar sus dispositivos.
Muchos jugadores creen que la nueva generación de consolas no vale el aumento de coste.
Los datos de agencias de análisis muestran que el número de hogares con una consola de videojuegos no ha cambiado significativamente en más de una década. Muchos jugadores se resisten a cambiar a nuevas consolas porque no ven una razón convincente para hacerlo. Aunque los fabricantes intenten promocionar que las nuevas versiones son más potentes y rápidas, esto no basta para impulsar las ventas si los consumidores no notan la diferencia.
Las consolas de juegos de alta gama no son suficientes para convencer a los jugadores
Sony lanzó recientemente la PlayStation 5 Pro por $700, que utiliza tecnología de inteligencia artificial (IA) para mejorar la velocidad de fotogramas y la calidad de imagen en al menos 82 juegos. Sin embargo, el interés en el producto ha sido menor de lo esperado. Como resultado, la firma de análisis Niko Partners predice que las ventas de la PS5 Pro solo representarán alrededor del 10% de las ventas totales de la PS5 al final de su vida útil, una cifra inferior a la de la PS4 y la PS4 Pro.
Lo mismo ocurre con la Xbox Series X de Microsoft. A pesar de las mejoras de rendimiento, su elevado precio implica que muchos consumidores no ven la necesidad de actualizarse. Nuevas funciones como el trazado de rayos y la animación facial requieren chips avanzados y costosos, y los precios de los componentes no han bajado con el tiempo.
Tanto Sony como Microsoft están cambiando estrategias en el mercado de consolas de juegos.
Mientras tanto, tras abandonar la competencia en 2001 con la GameCube, Nintendo ha cosechado éxitos con la Nintendo Switch, que, si bien no es la más potente, ha atraído a un gran público. El director de desarrollo de dispositivos de Nintendo, Ko Shiota, enfatizó que crear un producto de alto precio no implica necesariamente una mejor idea, y que la compañía seguirá centrándose en desarrollar productos basados en la colaboración entre los equipos de hardware y software.
Tanto Sony como Microsoft están ajustando sus estrategias a medida que cambian los hábitos de compra de consolas de los jugadores. El director ejecutivo de Sony, Kenichiro Yoshida, afirma que el éxito no se basa solo en las ventas, sino también en el tiempo que los jugadores dedican a jugar. Microsoft, por su parte, se está alejando de las consolas caras y se está enfocando en atraer a los usuarios mediante aplicaciones para múltiples dispositivos, junto con su servicio Xbox Game Pass Ultimate, que da acceso a docenas de juegos en la nube.
Con lo que está sucediendo, cuando el mercado de las consolas de juegos está pasando por grandes cambios, los fabricantes necesitan encontrar nuevos rumbos para atraer a los consumidores en el contexto de una competencia cada vez más feroz.
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Fuente: https://thanhnien.vn/game-thu-khong-con-man-ma-nang-cap-thiet-bi-185241128004241635.htm
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