Rusia advirtió el 22 de noviembre sobre las condiciones humanitarias en los puestos de control en la frontera con Finlandia, donde cientos de migrantes están varados bajo temperaturas gélidas.
Cada vez aparecen más inmigrantes en la zona fronteriza entre Rusia y Finlandia, lo que obliga a Helsinki a cerrar cuatro puestos de control fronterizos. (Fuente: The Moscow Times) |
Según la radio pública finlandesa YLE, más de 500 solicitantes de asilo han cruzado la frontera de Rusia a Finlandia desde principios de noviembre, principalmente desde Somalia, Siria, Yemen e Irak. Helsinki acusó a Rusia de impulsar deliberadamente este flujo de personas hacia Finlandia en represalia por la adhesión del país nórdico a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
La situación en el puesto de control de Salla, en la frontera con Finlandia, puede considerarse una crisis humanitaria, afirmó Andrey Chibis, gobernador de la región rusa de Murmansk, fronteriza con Finlandia. Actualmente hay unas 300 personas procedentes de más de 10 países esperando durante días para cruzar la frontera.
El señor Chibis criticó a Helsinki por su negativa a aceptar inmigrantes. Al mismo tiempo, también compartió un vídeo en las redes sociales, en el que se ven decenas de autos y camiones parados en una carretera cubierta de nieve, mientras otro grupo de personas se refugiaba en tiendas de campaña.
Las relaciones entre Helsinki y Moscú se han deteriorado drásticamente desde que Rusia lanzó una operación militar especial en Ucrania en febrero de 2022. En abril de 2023, Finlandia abandonó su política de décadas de alianzas no militares para unirse a la OTAN, lo que llevó a Rusia a advertir sobre contramedidas.
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