La inflación en EE.UU. es mayor a la prevista

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El índice de precios al consumidor (IPC) de Estados Unidos subió en enero más de lo que esperaban los analistas, reduciendo las expectativas de que la Fed pronto recorte las tasas de interés.

Los datos publicados por el Departamento de Trabajo de EE. UU. el 13 de febrero mostraron que el IPC de EE. UU. aumentó un 0,3% en enero y un 3,1% en comparación con el mismo período del año pasado, frente al 3,4% de diciembre.

Sin embargo, la cifra fue superior a las previsiones de los economistas encuestados por Dow Jones , que esperaban un aumento en enero del 0,2% y un incremento anual del 2,9%.

Las cifras del IPC recién publicadas afectaron de inmediato a los mercados financieros. Los principales índices bursátiles estadounidenses cayeron bruscamente ante la preocupación de que los recortes de las tasas de interés no se implementaran pronto. El Promedio Industrial Dow Jones cayó más de 500 puntos en las primeras operaciones del 13 de febrero, su mayor caída en casi un año. El S&P 500 y el Nasdaq también cayeron más del 1%.

El mercado de criptomonedas también fluctuó considerablemente. Bitcoin, la criptomoneda de mayor capitalización bursátil, cayó casi un 3%, de más de 50.000 dólares a 48.600 dólares en tan solo unos minutos.

Excluyendo los precios de los alimentos y la energía, el IPC subyacente subió un 0,4% en enero y un 3,9% interanual, sin cambios respecto a diciembre. Los analistas habían pronosticado aumentos del 0,3% y el 3,7%.

Los precios de las viviendas, que representan alrededor de un tercio del IPC, contribuyeron con la mayor parte del aumento en el primer mes de 2024. El índice subió un 0,6% en el mes y un 6% respecto al año anterior.

Los precios de los alimentos también subieron ligeramente, un 0,4% mensual. Mientras tanto, el índice de precios de la energía cayó un 0,9%, debido principalmente a una caída del 3,3% en los precios de la gasolina.

“En general, la inflación avanza en la dirección correcta”, afirmó Lisa Sturtevant, economista jefe de Bright MLS. “Pero es importante recordar que una inflación más baja no significa que los precios de la mayoría de los productos estén bajando, sino que simplemente significa que los precios suben más lentamente. Los consumidores aún sufren el impacto del aumento de precios en los artículos que compran habitualmente”.

Los datos del IPC de enero llegan mientras la Reserva Federal lucha por encontrar el equilibrio adecuado para la política monetaria en 2024. Si bien los mercados esperan recortes agresivos de las tasas este año, los funcionarios de la Fed han sido cautelosos en sus declaraciones, centrándose en la necesidad de números y evaluaciones en lugar de una hoja de ruta específica.

Los responsables de las políticas monetarias, incluido el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijeron que la fortaleza de la economía estadounidense le da a la Reserva Federal más margen de maniobra, ya que no tiene que preocuparse de que las tasas de interés más altas dañen el crecimiento.

A pesar de que los precios siguieron subiendo, las ganancias por hora ajustadas a la inflación aumentaron un 0,3 % mensualmente. Sin embargo, semanalmente, las ganancias reales cayeron un 0,3 %. Las ganancias reales promedio por hora aumentaron un 1,4 % con respecto al año anterior.

Los funcionarios de la Reserva Federal prevén que la inflación se reduzca hacia su objetivo del 2%, en gran medida debido a las expectativas de una desaceleración de los precios de la vivienda este año. Sin embargo, el aumento repentino de enero podría representar un problema para un banco central que busca flexibilizar la política monetaria, que se encuentra en su nivel más restrictivo en más de dos décadas.

"El esperado informe del IPC decepcionó a quienes esperaban una moderación en la inflación", declaró Quincy Krosby, estratega global de LPL Financial. "En general, las cifras fueron mejores de lo previsto, lo que sin duda sugiere que la Fed necesitará más datos antes de iniciar su ciclo de recortes de tasas".

La inflación subyacente, que los funcionarios de la Fed consideran un mejor indicador de las tendencias a largo plazo, ni siquiera disminuyó en enero, ya que los precios de la vivienda se mantuvieron más altos de lo esperado.

Minh Son (según CNBC)

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