El camino está justo debajo de tus pies.

Para Pham Thi Hong Phuong, residente en Ciudad Ho Chi Minh, el fracaso es una parte inevitable del proceso de crecimiento de los jóvenes, siempre y cuando se atrevan a seguir adelante.

Hong Phuong es la dueña de una cafetería donde vende bebidas y pasteles caseros. Se graduó en Biotecnología, pero tras un periodo de prácticas, se dio cuenta de que su verdadera pasión era la repostería, no solo por su fascinación por los sabores, sino también por la calidez que transmite cada producto. Esta joven, que se graduó en la promoción de 9X, decidió dejar su trabajo para dedicarse al sector de la hostelería con el objetivo de crear un lugar donde la gente pueda relajarse, trabajar o simplemente inspirarse cada día.

El objetivo futuro de Phuong es abrir una panadería independiente o combinarla con el modelo actual de cafetería, pero en un espacio más grande.

Phuong confesó: "No siempre estamos preparados ni contamos con las mejores condiciones para empezar; lo importante es atreverse a dar el primer paso". Phuong se repetía a sí misma que debía hacer las cosas pequeñas con mucho cariño, porque el amor no basta, sino que requiere habilidad y disciplina. Perfeccionó sus habilidades: mezclar, diseñar espacios, administrar las finanzas, atender a los clientes... y a veces lo hacía todo ella misma. Al principio, Phuong solo vendía pasteles artesanales por internet, adquiriendo experiencia poco a poco y acumulando capital. Tres años después, abrió la pastelería y cafetería Bittersweet. Según Phuong, "Bittersweet" (agridulce) son dos matices aparentemente opuestos, pero combinados representan los verdaderos sabores de la vida. "Agridulce" simboliza las experiencias de su trayectoria: dificultades, desaliento, pero también mucha dulzura al ver las sonrisas de los comensales, el apoyo de sus familiares y la alegría de vivir un sueño.

En lugar de expandirse rápidamente sin recursos suficientes, Phuong se centra en una gestión financiera cuidadosa y en aprovechar las redes sociales para fortalecer las conexiones y construir una comunidad de clientes leales para el restaurante.

La tienda se estabilizó gradualmente y forjó su propia identidad. Phuong elaboraba los pasteles y gestionaba el negocio personalmente. Ante la enorme presión financiera y la competencia en el sector, Phuong siempre tuvo presente que la experiencia del cliente era primordial: desde la calidad de la comida y las bebidas hasta el espacio, la música y la atmósfera acogedora. Además de mantener su identidad, seguía investigando, probando y desarrollando nuevas recetas de pasteles de temporada. Los ingredientes y los procedimientos de elaboración se controlaban rigurosamente, incluso cuando los costes aumentaban.

En su trayectoria empresarial, Phuong atesora cada recuerdo con su familia, clientes y personal; especialmente con su amiga íntima y actual gerente de la tienda, quien siempre ha estado a su lado.

Fuente: https://nld.com.vn/loi-di-ngay-duoi-chan-minh-196250621201228889.htm