Los jóvenes y la travesía de "mantener viva la llama" de la cultura del té vietnamita

VHO - Recientemente, en Hanói, el taller Ai Tra ha atraído la atención de muchos jóvenes amantes de la cultura tradicional. Este espacio experiencial ofrece un enfoque novedoso, donde el té con leche no es solo una bebida familiar, sino que se convierte en un lenguaje para expresar emociones y conectar con la tradición del té vietnamita de una manera juvenil y creativa.

La experta en té Trang Nguyen comparte detalles sobre la cultura del té vietnamita.

Con el acompañamiento de la maestra del té Trang Nguyen y la marca SHANSEN, el taller Ai Tra organizado por un grupo de estudiantes de la Facultad de Comunicación y Cultura Extranjera (Academia Diplomática ) ha abierto un espacio especial donde se despierta profundamente el amor de la generación joven por la antigua tradición del té Shan Tuyet.

Ai Tra no es un simple taller de elaboración de té con leche. Es un viaje de descubrimiento , un espacio para revivir el amor por la tradición del té vietnamita, una quintaesencia cultural profundamente arraigada en el pueblo vietnamita desde hace muchas generaciones.

En lugar de conservarlo de forma seca según el modelo antiguo, Ai Tra optó por un enfoque moderno, utilizando el lenguaje de las emociones y el amor a través de deliciosas tazas de té con leche, de modo que la antigua historia del té Shan Tuyet se vuelve a contar de una manera muy novedosa y cercana a la juventud actual.

Los asistentes practican cómo preparar té ellos mismos.

En el taller, los asistentes escucharon a la maestra del té, Trang Nguyen, compartir la belleza del patrimonio del té vietnamita y el minucioso proceso de elaboración de tazas de auténtico té antiguo Shan Tuyet. Cada gesto de la ceremonia, desde la selección de cada brote hasta el método y el tiempo de infusión, se llevó a cabo con meticulosidad y respeto.

De este modo, los jóvenes comprenden que el té vietnamita no es solo un producto agrícola , sino también una historia cultural centenaria que contiene la quintaesencia de la tierra y el cielo de Vietnam.

Tras la sesión de intercambio, los participantes pudieron preparar té con leche, una bebida muy popular entre los jóvenes de hoy. Cada persona recibió orientación para ajustar el dulzor y el sabor según las emociones y los mensajes que deseaban transmitir.

Algunas personas lo preparan para regalárselo a sus mejores amigos, otras usan una taza de té con leche como un "puente" para expresar sus sentimientos, y otras lo preparan para sí mismas como una forma de escucharse y apreciarse.

En el momento de preparar el té uno mismo, sintiendo el aroma de los brotes ancestrales añejados por el viento y la lluvia de las montañas y los bosques, el té vietnamita deja de ser un concepto lejano. La herencia se vuelve algo cercano, arraigado en el alma de los jóvenes, que se experimenta de una forma suave, natural y emotiva.

Con la receta en la mano, cada persona se convierte en narradora de historias mientras comparte una taza de té.

Tran Thanh Thao, estudiante de la escuela secundaria Tay Ho, compartió: “Me encanta el té y quiero aprender más sobre el té vietnamita, así que me inscribí en el taller. Cada vez se importan más tés con leche extranjeros, lo que a veces nos hace olvidar el té vietnamita. Este taller me ayuda a comprender mejor el té de mi tierra natal”.

La maestra del té, Trang Nguyen, lleva siete años trabajando en la antigua plantación de té Shan Tuyet en Suoi Giang (Yen Bai) y actualmente es experta en ceremonias del té en eventos diplomáticos nacionales. Sin embargo, le preocupa que la joven generación vietnamita, futura heredera de este patrimonio, esté olvidando poco a poco el valor tradicional del té vietnamita.

“Espero que el proyecto Ai Tra pueda contribuir a preservar y promover la cultura del té vietnamita y, especialmente, a llegar a los jóvenes de una manera más cercana y juvenil”, dijo.

Los jóvenes disfrutan de las actividades del taller.

Muchos jóvenes que participaron en el taller también admitieron que nunca pensaron que podrían amar tanto el té vietnamita, hasta que pudieron preparar y disfrutar una taza de té con leche hecho con árboles de té ancestrales.

Al degustar el sabor de los brotes de té centenarios que viven entre la niebla y las nubes de Suoi Giang, se dan cuenta de que los valores vietnamitas aún existen en las cosas más sencillas.

Le Ha Nhi, estudiante de la Academia Diplomática, comentó: “Lo primero que me impresionó fue la profesionalidad y la creatividad con que se comunicó el proyecto. Por eso me despertó la curiosidad y quise participar. Al llegar al taller, me sorprendió aún más la excelente organización de todas las actividades, desde la distribución del espacio hasta la forma en que se transmitió el conocimiento”.

“En particular, disfrutar y aprender sobre los tés vietnamitas me ha brindado una experiencia muy profunda. Gracias a las enseñanzas de la maestra del té Trang Nguyen, comprendo mejor las complejidades del proceso de elaboración, así como los valores culturales que el té vietnamita preserva. Siento que tengo acceso a esta herencia de una manera más íntima, nada árida, sino muy inspiradora y fácil de comprender”, compartió Nhi.

Este taller demuestra, en parte, que los jóvenes no olvidan el patrimonio cultural. Al contrario, son el puente creativo entre el pasado y el futuro, personas que se atreven a innovar, que se atreven a narrar historias antiguas con un lenguaje familiar, sincero y emotivo.

Ai Tra ha estado sembrando las semillas del amor para que cada joven vietnamita pueda decir con orgullo que la cultura vietnamita vive en ellos, comenzando con un sorbo de té.

Fuente: https://baovanhoa.vn/du-lich/nguoi-tre-va-hanh-trinh-giu-lua-van-hoa-tra-viet-141509.html