Los lagos están llenos como espejos.

La mano del hombre sabe desde hace mucho tiempo aprovechar las ventajas de la naturaleza al servicio de la vida. La excavación de embalses para almacenar agua para riego, la apertura de arroyos para enfriar tierras áridas o el uso de la energía hidráulica para crear energía cinética han creado relatos históricos de la civilización humana. En Vietnam, el sistema de lagos de irrigación se ha convertido desde hace mucho tiempo en una atracción turística, incluso en un punto de interés cultural, como un espejo natural.

Revista Heritage