La seguridad alimentaria debe cambiar a partir de los hábitos de los consumidores.

Sin embargo, según el Sr. Ta Van Tuong, subdirector del Departamento de Agricultura y Medio Ambiente de Hanói, ese hábito de consumo no es del todo correcto desde el punto de vista científico. Dado que el clima tropical cálido y húmedo de Vietnam crea fácilmente las condiciones propicias para el crecimiento y desarrollo de bacterias, si la carne no se conserva a tiempo, su frescura se verá comprometida, lo que dificulta garantizar la seguridad alimentaria.

El Sr. Tuong cree que los vietnamitas necesitan adoptar los hábitos de consumo de muchos países desarrollados, como el consumo de carne refrigerada. En concreto, tras el sacrificio, la carne caliente se enfría lentamente, lo que ayuda a conservarla durante más tiempo manteniendo sus componentes nutricionales, su sabor y su seguridad alimentaria. «Si los consumidores no cambian sus hábitos y optan por la carne refrigerada, a los productores de productos buenos y seguros les resultará difícil desarrollarse, ya que a los consumidores les costará aceptarla», afirmó el Sr. Tuong.

Según el Sr. Tuong, la producción agrícola a pequeña escala, que solo vende productos crudos a comerciantes, suele enfrentarse a numerosos riesgos. Por lo tanto, para garantizar la seguridad tanto de productores como de consumidores, la producción agrícola debe seguir una cadena con un procesamiento profundo. Este procesamiento profundo no solo mejora la calidad del producto, sino que también aumenta el valor económico para quienes participan en la cadena. Un dato positivo es que los consumidores actuales tienen cada vez más exigencias en cuanto a la presentación y la calidad, especialmente en lo que respecta a la seguridad alimentaria, la trazabilidad, el origen, etc.

Un puesto de pollo en el mercado nocturno. Foto: Dinh Thanh Huyen.

Un puesto de pollo en el mercado nocturno. Foto: Dinh Thanh Huyen.

Para prevenir la entrada de alimentos de origen desconocido, el Departamento de Agricultura y Medio Ambiente de Hanói se ha centrado recientemente en promover el cumplimiento de la normativa sobre el sacrificio y la comercialización de animales y productos de origen animal, garantizando la inocuidad alimentaria y la transparencia en su procedencia. Asimismo, realiza controles rigurosos de las condiciones veterinarias, la seguridad alimentaria y la higiene ambiental en los mataderos.

El Departamento también combate con firmeza los mataderos clandestinos, las condiciones insalubres y la comercialización de productos nocivos para la salud humana. Además, la policía de Hanói ha procesado numerosos casos relacionados con el transporte, el sacrificio y el consumo de carne de ganado enfermo; la producción de alimentos falsificados; y la venta de productos animales de contrabando o sin la documentación que acredite su origen.

Según las estadísticas, actualmente existen 701 mataderos de ganado y aves de corral en Hanói, pero las autoridades solo controlan 150. Por lo tanto, aún existen numerosos mataderos pequeños que no garantizan la seguridad alimentaria en las comunas y barrios, lo que dificulta la gestión y la cuarentena veterinaria, así como la seguridad alimentaria y la higiene ambiental. Mientras que los pequeños mataderos sin licencia operan día y noche, introduciendo de contrabando grandes cantidades de productos en el mercado, los mataderos medianos y grandes no pueden competir, operando a solo un pequeño porcentaje de su capacidad.

El Sr. Dao Quang Vinh, director de la empresa Vinh Anh Food Technology Joint Stock Company, declaró que hace más de 10 años invirtió una gran suma de capital en la construcción de un moderno matadero con capacidad para 600 cerdos diarios. Sin embargo, actualmente la planta solo opera al 10% de su capacidad de producción diaria. Esto se debe a la fuerte competencia de los mataderos más pequeños, ya que estos no tienen que pagar gastos administrativos ni depreciación de maquinaria, mientras que su fábrica incurre en elevados costos en estos aspectos.

Para que los productos cárnicos seguros puedan competir y afianzarse en el mercado, el Sr. Vinh recomendó que las autoridades, tanto nacionales como locales, eliminen los mataderos ilegales y refuercen la inspección y el control para evitar que los productos de mala calidad se cuelen entre los controles.