Ese vínculo comienza con una tarjeta de estudiante aparentemente pequeña, pero es la clave que abre muchas ventajas para los jóvenes que viven lejos de casa. Además de acreditar su condición de estudiante, la tarjeta también permite obtener descuentos en el transporte público.
Además, al visitar museos o teatros, con solo mostrar tu carnet de estudiante, el precio de la entrada se reduce a casi la mitad, o en días especiales, puedes entrar gratis para participar en exposiciones, seminarios, conferencias, conciertos y mucho más. Gracias a esto, los estudiantes con presupuestos limitados tenemos la oportunidad de acceder a la rica vida cultural de Rusia.
Para un estudiante internacional que vive en una ciudad grande y cara como Moscú, estos beneficios específicos reducen la presión financiera sobre los estudiantes, hacen que la vida sea más factible, contribuyen a garantizar los derechos de los estudiantes, fomentan el aprendizaje y demuestran la conexión entre la política social, la educación y el desarrollo de los recursos humanos jóvenes.
Cabe destacar que estas políticas no se limitan a apoyar a un grupo pequeño, sino que cualquier persona elegible (estudiantes, personas mayores, familias numerosas, etc.) puede acceder a ellas. El sistema de seguridad social en Rusia no se limita a las pequeñas empresas de servicios públicos, sino que también se implementa a nivel macro con numerosas políticas de gran alcance.
Una de las políticas estratégicas a largo plazo más destacadas es el programa Capital de Maternidad, implementado desde 2007. Según RIA Novosti, a partir del 1 de febrero de 2025, el apoyo para el primer hijo supera los 8.000 USD, mientras que para el segundo hijo en adelante, este nivel alcanza casi los 11.000 USD, si la familia no lo ha recibido antes. Lo especial es que este apoyo, además de ser en efectivo, también está orientado a cubrir necesidades prácticas a largo plazo, como la compra o mejora de la vivienda, el pago de la educación de los hijos o la aportación al fondo de pensiones de la madre.
Según el anuncio del Fondo Social Ruso, en 2023, más de 13,8 millones de familias rusas recibieron apoyo del Capital de Maternidad, con un presupuesto total de miles de millones de rublos. Sin embargo, Rusia aún enfrenta un problema demográfico debido al descenso de la natalidad. El gobierno ha estado ajustando sus políticas, extendiendo el programa Capital de Maternidad al menos hasta 2030, ampliando el número de beneficiarios y combinándolo con otras medidas de apoyo, como el aumento de la baja por maternidad y exenciones fiscales para familias numerosas.
Fuente: https://baodanang.vn/chut-trai-nghiem-voi-an-sinh-xa-hoi-nga-3306220.html
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