El túnel de luciérnagas de Helensburgh es un túnel ferroviario abandonado en Helensburgh, Nueva Gales del Sur, Australia. Originalmente conocido como el túnel metropolitano, era un pasadizo subterráneo de 624 metros (2000 pies) diseñado para transportar carbón desde la mina de carbón metropolitana hasta las afueras de Helensburgh, Nueva Gales del Sur, Australia.
El túnel se inauguró el 1 de enero de 1889. Tras muchos años de funcionamiento, el humo y las cenizas de carbón se acumularon en él, lo que hacía peligroso el paso de los trabajadores. Para 1915, el túnel se clausuró oficialmente. Se selló un extremo y se utilizó como depósito de agua. Tras muchos años de abandono, el lugar parecía estar envuelto en una densa vegetación y escombros, haciendo que la gente olvidara su existencia.
No fue hasta 1995 que la Metropolitan Colliery Company drenó el túnel, lo limpió por dentro y por fuera y lo convirtió en un sitio histórico.
Tras la restauración, ocurrió algo inesperado. Cientos de miles de luciérnagas se instalaron en el túnel y eligieron este lugar como su hogar. Cubrieron la parte superior del túnel, brillaron con sus cuerpos y, al mismo tiempo, tejieron telarañas por toda la cueva para cazar presas. Según los entomólogos, el clima húmedo y la densa vegetación de la zona constituyen el hábitat ideal para las luciérnagas.
El brillo de las luciérnagas no solo atrae a otros insectos a la trampa, sino que también crea un ambiente mágico en el túnel de Helensburgh. La luz brillante de las luciérnagas se asemeja a las estrellas centelleantes en el cielo.
El espectacular espectáculo de luces ha cautivado a los lugareños. Tras la aparición de fotos y vídeos del túnel de luciérnagas de Helensburgh en redes sociales, personas de toda Australia comenzaron a acudir al túnel. Poco a poco, el túnel se ha convertido en una atracción turística internacional.
Mientras Helensburgh recibía atención, la gente perturbaba sin querer el hábitat de las luciérnagas. Les preocupaba más la calidad de sus fotos y vídeos que la sensibilidad de las luciérnagas del túnel. Ignoraban advertencias como no iluminar el techo del túnel ni encender bengalas. Pronto, la población de luciérnagas comenzó a disminuir.
Para evitar la destrucción total, en enero de 2019 las autoridades de Helensburgh prohibieron temporalmente la entrada al túnel, con la esperanza de que el número de luciérnagas en el túnel pudiera recuperarse y reproducirse más.
El túnel ahora está abierto nuevamente a los visitantes, pero la organización comunitaria Helensburgh Landcare ha emitido reglas de conducta que los visitantes deben seguir para proteger los cientos de miles de luciérnagas del túnel.
Tuberculosis (según Vietnamnet)Fuente
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