Corea del Sur quiere prohibir los jardines de infancia ingleses

En grandes ciudades como Seúl y Busan, que los niños aprendan inglés desde pequeños se ha convertido en la norma entre la clase media coreana. Muchos padres están dispuestos a pagar matrículas cinco veces más altas para que sus hijos asistan a jardines de infancia que imparten clases completamente en inglés.

La Sra. Hwang, cuyo hijo asiste a un jardín de infancia donde se enseña inglés como lengua materna, compartió: «Quiero que mi hijo esté expuesto a este idioma de forma natural desde pequeño. Lo considero una inversión necesaria».

Estos "jardines de infancia ingleses" suelen aplicar un currículo y un entorno comunicativo completamente en inglés, simulando los métodos educativos de Estados Unidos o Canadá. Sin embargo, el modelo corre el riesgo de desaparecer si se aprueba un proyecto de ley propuesto por un grupo de políticos .

Según el proyecto de ley, a los niños menores de 36 meses se les prohibiría tomar clases que tengan como objetivo la "globalización" o la "preparación para el ingreso a la escuela". Los niños de 3 a 7 años no aprenderían inglés más de 40 minutos al día. Los infractores podrían ver suspendidas sus operaciones o revocadas sus licencias.

El Ministerio de Educación de Corea del Sur afirma que casi el 48% de los niños menores de 7 años están matriculados en al menos algún tipo de educación privada, gran parte de la cual implica el aprendizaje de idiomas extranjeros. Un informe de 2019 del Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas concluyó que los niños surcoreanos se enfrentan a presiones académicas desde una edad temprana, especialmente en las áreas de lengua y matemáticas.

Por lo tanto, el proyecto de ley se considera un intento de reducir la presión académica y la comercialización de la educación preescolar, especialmente en el contexto en que muchos niños pequeños tienen que realizar exámenes de ingreso a prestigiosas escuelas preescolares.

Además, algunos estudios han demostrado que muchos "jardines ingleses" operan bajo un modelo de franquicia, importando programas de Estados Unidos o Canadá sin evaluación de contenido ni acreditación pedagógica. Se contrata a docentes nativos para impartir clases, pero muchos carecen de certificados de educación preescolar.

Sin embargo, muchos padres consideran que esto constituye una intervención gubernamental excesiva en el derecho de sus familias a elegir su educación. Incluso algunos expertos que apoyan la reforma afirman que una prohibición total es una medida extrema.

La experiencia de regulaciones anteriores muestra que el mercado de educación privada en Corea siempre ha encontrado formas de adaptarse, pasando a un modelo de tutoría personal u operando bajo el nombre de “centros de habilidades”.

En respuesta, el Ministerio de Educación ha creado un grupo de trabajo para explorar una solución de compromiso. Las medidas que se están considerando incluyen limitar el tiempo de aprendizaje del inglés, estandarizar a los docentes, otorgar licencias claras a las instituciones cualificadas y reforzar la supervisión del contenido de la formación.

Apoyando la nueva normativa, la profesora Son Hye-sook, de la Universidad Femenina de Kyungin, afirmó: «En el jardín de infancia, los niños deben desarrollar sus capacidades emocionales y creativas. Aprender inglés académico demasiado pronto carece de fundamento científico. El lóbulo temporal, la zona del cerebro que procesa el lenguaje, solo se desarrolla plenamente después de los 7 años».

Según el Korea JoongAng Daily

Fuente: https://giaoducthoidai.vn/han-quoc-muon-cam-truong-mau-giao-tieng-anh-post751421.html