Ayer fue el decimotercer día de huelga de miles de médicos en formación en hospitales generales de todo el país. El gobierno dice que el plan abordará la escasez de personal médico , ya que Corea del Sur tiene una de las proporciones médicos por población más bajas entre los países desarrollados.
Mientras tanto, los médicos temen que la reforma reduzca la calidad de la educación y los servicios médicos, pero los defensores del plan acusan a los médicos de intentar proteger sus salarios y su estatus social.
Los médicos surcoreanos, "sobrecargados de trabajo y desatendidos", se declaran en huelga
Según Yonhap, multitudes se reunieron ayer en el distrito de Yeouido, en el oeste de Seúl, ondeando banderas y sosteniendo pancartas en protesta por las cuotas de admisión sin el consentimiento de la industria médica. Antes de la protesta de ayer, aparecieron muchos artículos en línea afirmando que algunos médicos estaban obligando al personal de ventas de las compañías farmacéuticas a participar. Las autoridades señalaron que el acto podría constituir coerción ilegal y violar la Ley de Servicios de Salud.
La oficina presidencial de Corea del Sur anunció el mismo día que respondería "sin piedad" a los médicos que inciten a los vendedores de medicamentos a unirse a la protesta que está causando una crisis en la industria médica del país. El gobierno ha fijado el 29 de febrero como fecha límite y ha amenazado con iniciar procedimientos penales y retirar los certificados de ejercicio de la profesión, pero parece que ha resultado ineficaz, ya que hasta ahora sólo unos cientos de personas han vuelto al trabajo.
Los médicos se unen a la protesta en Seúl el 3 de marzo.
Kim Taek-woo, jefe del comité de emergencia de la KMA, advirtió ayer que el gobierno se enfrentaría a la resistencia pública "si ignora los esfuerzos de los médicos y trata de reprimirlos". La huelga de médicos ha afectado a las cirugías y a las urgencias de muchos hospitales.
"Si la situación de ausencias ilegales en centros médicos continúa, el gobierno no dudará en cumplir con su deber estipulado en la Constitución y las leyes", afirmó el primer ministro Han Duck-soo en una reunión en Seúl.
El ministro del Interior, Lee Sang-min, intentó calmar la situación afirmando que los médicos en formación recibirían la máxima indulgencia si regresaban al trabajo el 3 de marzo. Por el contrario, el gobierno no tiene otra opción que "tratarlos con severidad, conforme a la ley". El Ministro enfatizó que aumentar la meta de inscripción en 2.000 personas por año no es una cifra significativa debido a la necesidad de desarrollar la industria biológica, que se prevé que sea un nuevo motor de crecimiento para Corea, que requiere una gran fuerza laboral.
[anuncio_2]
Enlace de origen
Kommentar (0)