Elija panceta de cerdo (panceta de cerdo de tres capas) con la carne magra y grasa bien mezclada. Lave la carne con vinagre y sal, y raspe la piel. Hierva agua, coloque la carne en una olla (presione la piel contra el fondo y use palillos para presionar uniformemente las esquinas y darle forma; al asarla, la piel se inflará uniformemente). Puede agregar un poco de sal, unas rodajas de jengibre y unas chalotas machacadas para que la carne tenga un aroma más aromático. Cocine solo 5 minutos, luego apague el fuego, voltee la carne en el agua para blanquearla, luego retire la carne, lávela de nuevo, escúrrala y séquela con papel absorbente. Use un tenedor, una brocheta o una herramienta especial para perforar uniformemente la piel del cerdo; si se toma la molestia de perforar toda la superficie, esta se inflará aún más al asarla. Dale la vuelta a la carne, utiliza un cuchillo afilado para hacer algunos cortes largos con una separación de unos 2 cm entre sí, ten cuidado de cortar solo la carne, sin tocar la grasa ni la piel.
Mezcle la mezcla para marinar la carne, incluyendo sal, azúcar, glutamato monosódico, condimento en polvo, ajo en polvo o polvo de cinco especias, 1 cucharadita de cada uno por cada 1 kg de panceta de cerdo, y mezcle bien. Marine la carne con las especias, frotándolas bien para que las especias puedan penetrar en las ranuras de la carne, pero sin dejar que se peguen a la piel. Coloque la carne en una caja grande, con la piel hacia arriba, use un pincel para extender la mezcla (incluyendo 2 cucharadas de vinagre y 1 cucharadita de sal) sobre la piel varias veces, extendiéndola cuando la piel se sienta seca. Si tiene tiempo, déjela toda la noche en el refrigerador (no cubra la caja para que la piel esté siempre seca), o déjela marinar durante 2-3 horas para que la carne absorba las especias.
Precaliente el horno o la freidora de aire a 180 ° C. Mientras el horno se calienta, envuelva la carne en papel aluminio, envolviéndola bien, dejando la piel descubierta. Hornee durante 20 minutos, retire el papel aluminio, aumente la temperatura a 200 ° C y hornee durante 20-30 minutos más, hasta que la carne esté cocida y la piel crujiente. Si la distancia entre la olla y la resistencia es considerable, coloque la carne encima; cuanto más expuesta esté la piel a altas temperaturas, más crujiente quedará.
Espere al menos 20 minutos después de que la carne esté cocida antes de cortarla para que los jugos se absorban y no se seque. La carne es tierna, sabrosa y su piel crujiente estimula el paladar, lo que hace que valga la pena el esfuerzo en la cocina.
NÓTESE BIEN
Fuente: https://www.baobaclieu.vn/van-hoa-nghe-thuat/heo-quay-da-gion-dam-vi-99839.html
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