Huawei planea comenzar a producir en masa sus chips de inteligencia artificial (IA) más avanzados en el primer trimestre de 2025, a pesar de las dificultades para aumentar la productividad de los chips.
La empresa tecnológica china Huawei planea comenzar a producir en masa sus chips de inteligencia artificial (IA) más avanzados en el primer trimestre de 2025, a pesar de las dificultades para aumentar la productividad de los chips debido a las sanciones estadounidenses.
Huawei planea producir en masa el chip Ascend 910C a principios de 2025 |
Huawei ha enviado muestras del chip Ascend 910C a algunos clientes y ha comenzado a aceptar pedidos anticipados. El nuevo chip es fabricado por la fundición más grande de China, SMIC, mediante el proceso N+2, pero la falta de máquinas de litografía avanzadas implica que el rendimiento (la tasa de éxito de producción de chips en una oblea) es solo del 20%.
Mientras tanto, los chips modernos necesitan alcanzar un rendimiento superior al 70 % para comercializarse. Incluso el procesador más avanzado de Huawei, el 910B, fabricado por SMIC, solo alcanza un rendimiento cercano al 50 %, lo que obliga a Huawei a reducir sus objetivos de producción y retrasar el cumplimiento de los pedidos.
ByteDance, la empresa matriz de TikTok, supuestamente encargó más de 100.000 chips Ascend 910B este año, pero para julio había recibido poco menos de 30.000 unidades. Otras empresas tecnológicas chinas se han quejado de problemas similares.
China no ha podido comprar impresoras EUV a ASML, de los Países Bajos, debido al embargo estadounidense de 2020. ASML también dejó de vender máquinas de litografía ultravioleta profunda DUV al país tras las restricciones a la exportación impuestas por Estados Unidos el año pasado. Ante la falta de una solución a corto plazo, Huawei está priorizando los pedidos institucionales y gubernamentales .
Las autoridades estadounidenses también planean controlar las exportaciones de la industria de semiconductores y restringir aún más las exportaciones a empresas chinas. Además, el regreso del presidente electo Donald Trump a la Casa Blanca en enero de 2025 también planteará dificultades adicionales para China, ya que ha implementado duras políticas comerciales con Pekín.
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