La UE y la OTAN están molestas, y Ucrania protesta enérgicamente, por la visita sorpresa del primer ministro eslovaco, Robert Fico, a Rusia y sus conversaciones con el presidente anfitrión, Vladimir Putin.
Para Occidente, viajar a Rusia para reunirse con el Sr. Putin es un tabú. Sin embargo, el Sr. Fico no sentó precedente. Poco después del estallido del conflicto en Ucrania, el canciller austriaco Karl Nehammer viajó a Rusia. Asimismo, justo después de asumir la presidencia rotatoria de la UE para el segundo semestre de este año, el primer ministro húngaro Viktor Orbán también viajó a Rusia. Recientemente, el canciller alemán Olaf Scholz conversó telefónicamente con el Sr. Putin.

El primer ministro eslovaco, Robert Fico, mantendrá conversaciones con el presidente anfitrión, Vladimir Putin, en Moscú el 22 de diciembre de 2024.
No todos los miembros de la UE y la OTAN mencionados anteriormente se oponen siempre a la postura política común de la UE o la OTAN respecto a Moscú ni a su apoyo a Ucrania en su conflicto con Rusia. Sin embargo, cada uno de estos países tiene sus propios mecanismos para garantizar sus intereses.
El Sr. Fico viajó a Rusia para reunirse con el Sr. Putin justo después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, rechazara la propuesta de Eslovaquia de seguir permitiendo el tránsito de gas ruso por Ucrania. La UE accedió a que Eslovaquia continuara importando gas ruso, pero el Sr. Zelenski no estuvo de acuerdo. Kiev no está dispuesta a sacrificar los intereses de Ucrania por los de Eslovaquia, y el Sr. Fico no está dispuesto a sacrificar los intereses de Eslovaquia por los de Ucrania. La diferencia radica en que Ucrania y la UE se verán perjudicadas si el Sr. Fico permite que los intereses de Eslovaquia dicten la política y guíen las acciones. El Sr. Fico no puede actuar de otra manera porque Eslovaquia depende completamente del suministro de gas ruso y, además, recibe precios preferenciales de Moscú mientras no haya encontrado una fuente de suministro alternativa.
Ucrania critica a un miembro de la OTAN por el gas ruso.
Se observa que cuanto más se prolonga el conflicto en Ucrania, mayor es la fricción y el conflicto de intereses entre los países occidentales. Por consiguiente, más miembros de la UE y la OTAN «quebrantan las normas» para forjar su propio camino en las relaciones con Rusia. El caso del Sr. Fico es solo una prueba más, no la definitiva.
Fuente: https://thanhnien.vn/loi-ich-dan-dat-hanh-dong-185241224223629948.htm






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