Neymar, otrora aclamado como el “hijo predilecto”, se ha convertido ahora en el centro de la división en el vestuario del Santos. |
Lo sucedido en la derrota del Santos ante el Flamengo fue la gota que colmó el vaso en una relación que se deterioraba lentamente. En aquella derrota, Neymar se quejó de todo, desde los errores de sus compañeros hasta la gestión táctica del técnico Juan Pablo Vojvoda.
Cuando fue sustituido en el minuto 85, la antigua estrella del Barça y el PSG reaccionó violentamente, sin poder creer que lo sacaran del campo. En ese momento, la imagen de Neymar ya no era un símbolo del orgullo del Santos, sino la carga de una estrella que no podía aceptar que sus días de gloria habían quedado atrás.
Según Globo Esporte , muchos jugadores se sintieron ofendidos por la actitud de Neymar. La directiva también empezó a perder la paciencia. Consideraban que el rendimiento de Neymar era mediocre, habiendo participado solo en 15 partidos y perdiéndose 17 en la Serie A brasileña por lesión. La paciencia se agotaba, aunque el club decidió no sancionarlo tras el incidente.
Se dice que Neymar se disculpó, culpando al árbitro. Pero esa disculpa no mitigó el sentimiento de injusticia en el equipo. El jugador que llevó al Santos a la Copa Libertadores en 2011 ahora está provocando que el mismo equipo luche por evitar el descenso.
Santos recuperó a Neymar con la esperanza de revivir su antigua gloria. En cambio, obtuvieron una estrella inestable, explosiva e incontrolable. En plena crisis, Vojvoda necesitaba unidad, no un nombre que dividiera aún más el vestuario.
Neymar fue en su día el orgullo del Santos. Pero a sus 33 años, con su rendimiento en declive y su actitud cuestionada, ese cariño se está convirtiendo en cansancio. Un reencuentro que una vez estuvo lleno de emoción ahora termina en decepción.
Fuente: https://znews.vn/ngan-ngam-voi-neymar-post1602054.html






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