El sospechoso fue identificado esta semana como Francisco Oropesa, de 38 años, un ciudadano mexicano que, según funcionarios de inmigración, había sido deportado de Estados Unidos cuatro veces desde 2009.
El sospechoso Francisco Oropesa y el lugar donde se cometió el asesinato. Foto: GI
El sheriff del condado de San Jacinto, Greg Capers, informó a la prensa que Oropesa fue arrestado en una vivienda después de que varias agencias del orden lo buscaran. "Pasará el resto de su vida tras las rejas por matar a esas cinco personas", declaró.
Las víctimas fueron asesinadas en Cleveland, Texas. El sospechoso fue arrestado en Cut and Shoot, Texas, a unos 27 kilómetros al oeste de la escena del crimen.
Las autoridades dijeron que el incidente comenzó el viernes por la noche cuando Oropesa salió a practicar tiro en su patio, luego los vecinos le pidieron que se detuviera porque los disparos despertaron a sus hijos.
Según la policía y testigos, el sospechoso luego entró a la casa y cargó un arma, luego irrumpió en la casa de un vecino y abrió fuego, matando a cinco de las 10 personas que estaban adentro, incluido un niño de 8 años.
La mayoría de las víctimas recibieron disparos en la cabeza. El sheriff Capers dijo que todas eran hondureñas, pero no todas eran familiares.
Las víctimas fueron identificadas como Sonia Argentina Guzmán, de 25 años; Diana Velázquez Alvarado, 21; Julisa Molina Rivera, 31; José Jonathan Casarez, 18; y Daniel Enrique Laso, 8.
Mai Anh (según Reuters)
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