Mi madre me dijo que no lloraba de dolor, sino de miedo por perder a mi padre, su compañero de toda la vida. Pero entonces, ocurrió un milagro: mi padre y yo estábamos a salvo. Mi padre superó su fatal enfermedad cardíaca. Y la primera vez que me abrazó, rompió a llorar. «Reviví gracias a ti», me dijo cuando tuve edad suficiente para comprender el día de mi nacimiento.
Mi infancia no fue como la de otros niños. Mi padre no me llevaba en brazos ni me hacía retozar en sus hombros. De pequeño, me entristecía y me daba pena ver a mis amigos en brazos de mi padre. Pero entonces mi madre me decía: «Papá tiene miedo de que se caigan porque está enfermo y débil». En ese momento, ya no estaba triste, solo sentía más pena por mi padre.
Papá siempre acompaña a Bao Nhi en todas las actividades.
Mi padre era un hombre de pocas palabras, pero cada palabra que decía era una valiosa lección de vida que he llevado conmigo hasta el día de hoy.
Todavía recuerdo con claridad que un día llegué a casa de la escuela con cara de tristeza porque había sacado una mala nota en matemáticas. Mi padre no me regañó ni me preguntó por qué. Simplemente, en silencio, tomó un papel blanco, dibujó una escalera y dijo: "¿Ves esta escalera? Si quieres subir, tienes que subir peldaño por peldaño. Si te caes, te levantas y sigues adelante. Todos empiezan desde el peldaño más bajo y suben".
Mi padre me enseñó que el fracaso no da miedo; lo que realmente da miedo es rendirse.
Una vez, mis amigos me malinterpretaron y me sentí tan ofendido que rompí a llorar. Mi padre escuchó en silencio y luego dijo con dulzura: «No todos te entenderán de inmediato, pero si vives bien, el tiempo te lo dirá».
Esas palabras me acompañan hasta el día de hoy, recordándome que siempre debo vivir con bondad y ser firme en mi corazón. Mi padre rara vez nos dice palabras de cariño a mí y a mi madre, como otros padres, pero su amor impregna cada pequeña acción. Desde la luz de la escalera que enciende cuando mi madre y yo llegamos tarde a casa, hasta la mirada tranquila y orgullosa cada vez que me honran, subo al escenario o aparezco en televisión.
Entiendo que soy la esperanza de mi padre. No para ser el mejor, sino para ser una persona amable, fuerte y compasiva como mi padre, quien sacrificó su juventud y salud para protegerme a mí y a mi madre.
Si tuviera que llamar "héroe" a alguien, no dudaría en decir: "Ese es mi padre", la persona que vivió una vida tranquila para mí.
¡Te amo papá!
Hola amor, temporada 4, tema "Padre" se lanzó oficialmente a partir del 27 de diciembre de 2024 en cuatro tipos de prensa e infraestructura digital de Binh Phuoc Radio - Televisión y Periódico (BPTV), prometiendo llevar al público los maravillosos valores del sagrado y noble amor paternal. |
Fuente: https://baobinhphuoc.com.vn/news/19/172286/nguoi-hung-tham-lang
Kommentar (0)