Jama'at Nusrat al-Islam wal Muslimeen (JNIM), un grupo islamista extremista vinculado a la organización terrorista Al Qaeda, anunció que había capturado una base militar en el norte de Mali el 24 de noviembre.
Soldados malienses llegan a la Plaza de la Independencia en Bamako. Foto ilustrativa: AFP/TTXVN |
El grupo rebelde afirmó haber infligido grandes pérdidas al ejército del país.
Sin embargo, el ejército maliense afirmó haber repelido un ataque contra bases militares en la región de Tombuctú.
JNIM afirmó en su plataforma mediática de la Fundación Al-Zallaqa que había tomado el control del campamento de Niafounke el 24 de noviembre. La afirmación fue confirmada por SITE, un grupo de monitoreo estadounidense, el 25 de noviembre.
Decenas de soldados malienses murieron o resultaron heridos en el ataque y dos fueron capturados, indicó JNIM en un comunicado.
Mientras tanto, el ejército maliense confirmó que los ataques fueron "repelidos con fuerza".
Las afirmaciones aún no pueden verificarse porque el acceso a la zona de combate es difícil y peligroso.
Desde 2012, Malí está sumido en el caos, con enfrentamientos militares que se intensificaron especialmente en el norte del país, tras la reciente retirada de las fuerzas de la ONU a petición del gobierno gobernante, lo que dio lugar a feroces combates entre el ejército maliense y extremistas islamistas y separatistas por el control de la región.
Kidal ha sido durante mucho tiempo un foco de agitación y punto de partida de las insurgencias separatistas que han sacudido a Malí desde la independencia. El ejército maliense sufrió derrotas en la zona entre 2012 y 2014.
Mientras tanto, los Partidarios y Seguidores del Islam (GSIM), un grupo militante vinculado a la red terrorista Al-Qaeda, también han incrementado los ataques contra posiciones militares. Muchos expertos militares temen que los conflictos entre grupos armados y el ejército maliense, y entre grupos armados, se intensifiquen ante la ausencia de tropas de la ONU.
[anuncio_2]
Fuente
Kommentar (0)