El grafiti es una forma de arte callejero, generalmente creado con pintura en aerosol u otros materiales sobre superficies públicas. El grafiti suele llevar la huella personal de su creador, ya sea mediante escritura, dibujos o símbolos. El grafiti se puede encontrar en casi todos los rincones de Colombia, pero es más famoso en Bogotá, la capital.
Una obra de Stinkfish, reconocido artista callejero colombiano. Su obra enfatiza la importancia del ciudadano común y refleja la profunda convicción de que el arte público debe ser accesible para todos.
Aquí, los vibrantes grafitis que cubren las paredes narran historias de herencia indígena, de agitación política y de sueños de futuro. Entre los grafitis más famosos de Bogotá se encuentran Stinkfish, Toxicomano, DJLU, Bastardilla…
A diferencia de muchos países donde el grafiti está estrictamente restringido, Bogotá permite a los artistas pintar libremente si cuentan con el permiso del propietario de la pared o superficie. En Bogotá, los propietarios suelen contactar a los artistas del grafiti para seleccionar y discutir el contenido de la obra con ellos. Por eso, Bogotá es considerada un paraíso del grafiti.
El tour de graffitis es uno de los tours más populares en Bogotá
Esta libertad también atrae a artistas de graffiti internacionales y fomenta una comunidad local que crea arte que refleja la diversidad política, social y cultural de Colombia, dándole a Bogotá un lugar único en la escena mundial del arte urbano.
Actualmente, Bogotá cuenta con unos 5.000 grafiteros, de los cuales el 10 % son mujeres (Bogotá es el lugar con mayor concentración de grafiteras del mundo ). Los honorarios varían: pueden ser muy altos, pero también pueden ser... gratuitos. A veces, cuando encontramos un propietario adecuado, solo necesitamos patrocinar la pintura —dijo Samuel, grafitero argentino—.
"Salvo temas pornográficos, solo se requiere un acuerdo con el dueño del lugar donde se quiere pintar. El contenido de los grafitis es completamente libre; no hay temas sensibles ni zonas prohibidas", comentó Stiven, un grafitero de 28 años de Bogotá, al reportero Thanh Nien .
El trabajo de la Niña Indígena cerca del antiguo pueblo de Candelaria
En la capital de Colombia, los tours de grafiti son uno de los más populares . Guiados por artistas locales del grafiti, los visitantes aprenderán más sobre la historia y los mensajes detrás de las obras de grafiti en las calles. Otra curiosidad es que los murales cambian con frecuencia: aparecen nuevas obras y se revisten obras antiguas, lo que aporta singularidad y frescura a los visitantes en cada visita.
Peatón del artista Ryot en el casco antiguo de Candelaria, Bogotá
Cientos de grafitis en la calle 26 (Bogotá) marcan acontecimientos históricos y políticos, transmitiendo mensajes sociales y culturales de Colombia.
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Fuente: https://thanhnien.vn/bogota-noi-nhung-buc-tuong-biet-ke-chuyen-185250106180029096.htm
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