La empresa emergente marítima japonesa N-Ark ha presentado su ambicioso proyecto llamado Dogen City, una ciudad flotante que no solo se adaptaría al cambio climático, sino que también proporcionaría electricidad, agua y alimentos, así como servicios de salud avanzados para unas 40.000 personas.
Dogen City es una estructura flotante de 4 kilómetros de longitud diseñada para resistir condiciones climáticas extremas, desastres naturales e incluso tsunamis. La estructura circular está cubierta de vegetación y cuenta con infraestructura que incluye zonas residenciales, escuelas, instalaciones deportivas, hospitales, parques, estadios, hoteles y oficinas, centros de investigación médica , plantas de producción de alimentos e incluso plataformas de lanzamiento espacial. Se espera que albergue a unos 10.000 residentes permanentes y reciba hasta 30.000 turistas en cualquier momento.
El proyecto se divide en tres áreas distintas: las principales áreas residenciales, un centro de datos subterráneo que se enfría naturalmente con agua de mar para reducir el consumo de energía y un centro para recibir señales de los satélites SpaceX.
La atención de la salud física y mental también es una prioridad para Dogen City, donde los residentes tendrán acceso a consultas médicas a distancia y análisis de sangre de alta tecnología para el diagnóstico temprano de enfermedades, cirugía robótica...
N-Ark estima que la ciudad flotante generará cerca de 7.000 toneladas de alimentos y 22.265.000 kilovatios de electricidad. Si bien la empresa no ha proporcionado detalles sobre la ubicación ni el presupuesto del proyecto, afirma que se espera que la ciudad flotante esté operativa para 2030.
THANH TRUC (Según New Atlas, Global Construction Review)
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