DNVN - Matteo Lanzafame, economista jefe del Departamento de Investigación Macroeconómica, Departamento de Investigación Económica e Impacto del Desarrollo del Banco Asiático de Desarrollo (BAD), acaba de comentar sobre los impactos de la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) de recortar drásticamente las tasas de interés el 19 de septiembre en la región de Asia y el Pacífico.
Los recientes recortes de tipos de interés de la Reserva Federal presentan tanto oportunidades como desafíos para los bancos centrales de la región Asia- Pacífico . Según Matteo Lanzafame, los responsables políticos deben adoptar un enfoque equilibrado y específico para cada país para afrontar las presiones inflacionarias, la volatilidad cambiaria y las entradas de capital.
La Reserva Federal ha iniciado su tan esperado ciclo de flexibilización monetaria con un recorte de 50 puntos básicos. Los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) prevén otro recorte de 50 puntos básicos este año, extendiéndose la política de flexibilización hasta 2025.
Esta medida podría tener consecuencias significativas para la economía mundial, en particular para los países en desarrollo de la región Asia- Pacífico . Las presiones inflacionarias en la región se han aliviado este año a medida que los precios de las materias primas se estabilizan y comienzan a sentirse los efectos del ajuste monetario del año pasado. Como resultado, muchos bancos centrales de la región han pausado sus ciclos de subida de tipos, y algunos incluso han comenzado a recortarlos.
Al formular políticas, los bancos centrales de los mercados emergentes deben considerar el diferencial de tasas de interés con EE. UU., que afectará los flujos de capital y los tipos de cambio. La decisión de la Fed de recortar las tasas de interés brinda a los bancos centrales de la región la oportunidad de flexibilizar sus políticas para estimular la demanda y el crecimiento sin preocuparse por las salidas de capital ni la depreciación del tipo de cambio. Sin embargo, dado que el ciclo de flexibilización de la Fed es incierto en cuanto a ritmo y plazos, la respuesta política en Asia-Pacífico debe ser cautelosa y bien pensada.
Una opción para los bancos centrales es seguir el ejemplo de la Fed en la reducción de los tipos de interés, lo que impulsaría el crecimiento, pero también correría el riesgo de generar presiones sobre los precios y fomentar un endeudamiento excesivo en las economías altamente endeudadas. Como alternativa, los bancos centrales podrían adoptar una postura monetaria más restrictiva recortando los tipos de interés a un ritmo más lento o menor que el de la Fed.
Si las tasas de interés se mantienen bajas en EE. UU., los flujos de capital podrían dirigirse a Asia-Pacífico, ya que los inversores buscan rendimientos más atractivos, lo que podría impulsar los mercados de renta variable y de bonos y brindar alivio a las economías vulnerables. Sin embargo, un aumento de los flujos de capital podría incrementar la volatilidad de los mercados financieros, especialmente para las carteras a corto plazo.
Además, el aumento de los flujos de capital podría impulsar al alza los tipos de cambio regionales frente al dólar estadounidense, lo que beneficiaría a los países dependientes del petróleo y de las importaciones, contribuyendo a reducir la presión sobre los precios y a mejorar las balanzas comerciales. Para las economías con deuda denominada en dólares estadounidenses, un dólar estadounidense más débil contribuiría a reducir su carga de deuda.
La política fiscal puede ayudar a amortiguar el impacto de la caída de las exportaciones. Dependiendo del margen fiscal, las medidas de estímulo podrían centrarse en impulsar el consumo y la actividad en áreas con grandes repercusiones, a la vez que se invierte en infraestructura, eficiencia energética, adaptación climática y proyectos para abordar las brechas estructurales. Esto también impulsaría el potencial productivo de la economía.
La reducción de las tasas de interés en Estados Unidos y la perspectiva de un dólar estadounidense más débil podrían reducir los costos de importación, impulsar los mercados financieros y atraer flujos de capital a la región. Sin embargo, estos beneficios conllevan riesgos de volatilidad cambiaria y crecientes presiones inflacionarias. Los responsables políticos deben adoptar un enfoque flexible, mantenerse alerta y aprovechar proactivamente las oportunidades al tiempo que abordan los riesgos potenciales, afirmó el experto Matteo Lanzafame.
Vietnam (t/h)
[anuncio_2]
Fuente: https://doanhnghiepvn.vn/quoc-te/fed-ha-lai-suat-tac-dong-den-khu-vuc-chau-a-thai-binh-duong-ra-sao/20240930084117127
Kommentar (0)