El Complejo Paisajístico de Trang An es una combinación perfecta de reliquias culturales y naturales. Su interior es como una pintura paisajística con numerosos valles y ríos serpenteantes, sumamente especiales. Entre ellos se encuentra el palacio Vu Lam, una serie de reliquias únicas que definitivamente no te puedes perder en tu viaje para explorar la antigua capital de Hoa Lu.
El Palacio Vu Lam fue una base militar durante la dinastía Tran, ubicada en la región montañosa del sur de la antigua capital, Hoa Lu. Este lugar también está asociado con la conversión de los reyes Tran al monasterio y la difusión del budismo. El Palacio Vu Lam es ahora el núcleo del complejo paisajístico de Trang An, reconocido por la UNESCO como patrimonio cultural y natural de la humanidad.
El Palacio Imperial Vu Lam está ubicado en un sitio abierto y espacioso, que incluye muchas reliquias históricas como: la Puerta Quan, el Palacio Imperial, la Puerta del Dragón, Tuan Cao... con 24 pagodas antiguas existentes desde la Dinastía Tran hasta el presente, como la Pagoda Hai Nham, la Pagoda Bich Dong, la Pagoda Da, la Pagoda Linh Coc, la Pagoda San, la Pagoda Thong, la Pagoda So...
Al visitar el Palacio Vu Lam, admirará una antigua casa que aún existía antes de 1954, con un diseño minimalista y nada recargado. Aquí se conservan numerosos artefactos de gran valor histórico, que recrean una próspera dinastía en el período feudal de Vietnam, así como las rotundas victorias contra los invasores de nuestros antepasados. Cada primavera, amigos de todo el mundo se reúnen en el Palacio Vu Lam para venerar a Buda y visitar el paisaje para recordar a los reyes de la nación, así como para orar por la suerte y la paz.
Para apreciar plenamente la belleza natural de Ninh Binh , le recomendamos alquilar un barco y recorrerlo, explorando cada misteriosa zona dentro de la reliquia. Al llegar al Palacio Vu Lam, le sorprenderá el paisaje poético y majestuoso, junto con la sensación de que el tiempo ha pasado a través de los altibajos de la historia hasta nuestros días. De hecho, este lugar es un regalo invaluable para el pueblo vietnamita.
Vistas desde arriba, las obras arquitectónicas se asientan tímidamente junto a las verdes cordilleras. Barcos de madera salpican el paisaje natural, creando una belleza sofisticada y elaborada.
Revista Heritage






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