Movimientos de las empresas tecnológicas

En un discurso de 45 minutos en la primera conferencia para desarrolladores de OpenAI a principios de noviembre de 2023, el director ejecutivo Sam Altman presentó una política de protección legal llamada "Copyright Shield".

“Intervendremos y defenderemos a nuestros clientes y cubriremos los costos incurridos si enfrentan reclamos legales relacionados con la violación de derechos de autor”, afirma Sam Altman.

OpenAI confía en que puede defender legalmente a sus clientes, especialmente a medida que las demandas por derechos de autor de escritores, sellos discográficos y comediantes continúan afectando a Silicon Valley (mientras que las empresas de tecnología usan contenido de la web para entrenar chatbots y servicios de generación de imágenes).

El CEO de OpenAI afirma firmemente que OpenAI pagará las demandas por derechos de autor: "Tenemos mucha confianza en nuestro enfoque, pero queremos compartir esa confianza con los desarrolladores".

De hecho, OpenAI llegó tarde al juego de las compensaciones, según Bloomberg…

En junio, Adobe anunció que defendería a sus clientes de demandas por propiedad intelectual relacionadas con el uso de Firefly, su herramienta de generación de imágenes con IA. Por otro lado, Microsoft hizo lo mismo en septiembre con su compromiso "Copyright Copilot", prometiendo indemnizar a los clientes si son demandados por usar o distribuir documentos generados con IA en programas como Windows, Word, PowerPoint y Copilot, el generador de código de Github. El mes pasado, Google también anunció protecciones legales para los usuarios de sus servicios de IA. "Si lo demandan por derechos de autor, asumiremos los riesgos legales", declaró Google en su anuncio.

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Usuarios de herramientas de IA y “protección” contra demandas

Sin embargo, estas políticas solo se aplican a clientes comerciales que pagan por servicios como ChatGPT Enterprise y Firefly for Business. Estas opciones premium pueden incluir protecciones adicionales para prevenir el uso indebido de material protegido por derechos de autor.

Por el contrario, si un usuario utiliza un servicio gratuito como Dall-E y crea una obra de arte con la imagen de Mickey Mouse; luego la coloca en una valla publicitaria y Disney lo demanda, las protecciones no se aplicarán. De igual manera, si un usuario de ChatGPT le pide al chatbot que cree una nueva marca registrada que incluya la frase "Just Do It", los abogados de OpenAI no acudirán al rescate.

“No puedo simplemente pedirle al sistema que cree una pieza similar a Banksy y luego venderla como un gran producto de Banksy”, explicó Brenda Leong, socia de Luminos Law, un bufete especializado en IA. Las cláusulas de indemnización solo se aplican a modelos de negocio específicos y a clientes de ciertas versiones que ofrecen las empresas, afirmó. “Han incorporado numerosos controles en estos sistemas para garantizar que no se filtre información protegida”, añadió Brenda Leong.

También cabe destacar que las demandas actuales de escritores y creadores se centran principalmente en los datos utilizados para entrenar a la IA, como libros, código abierto e imágenes con derechos de autor. Adobe, Google, Microsoft y OpenAI cuentan con políticas de protección contra demandas relacionadas con productos generados por IA, y hasta la fecha no se han presentado demandas contra usuarios de IA por infracciones de derechos de autor causadas por esta.

Todo esto sugiere que las nuevas políticas y el marketing que las acompaña están dando resultados: ayudan a disipar las preocupaciones de las empresas y las animan a adoptar herramientas de IA generativa. Los abogados internos de estas empresas suelen preocuparse al ver noticias de demandas por derechos de autor, y temen que código fuente o propiedad intelectual protegidos por derechos de autor se incorporen inadvertidamente a los productos, lo que generaría graves problemas legales en el futuro. Estas son las mismas preocupaciones que surgieron en los inicios del movimiento de código abierto, antes de que empresas como Red Hat introdujeran las mismas protecciones que las empresas de IA emplean hoy en día.

Leong afirmó haber visto el impacto de estas políticas de compensación en acción. Uno de sus clientes, un consultor, había utilizado previamente Firefly de Adobe para desarrollar nuevas ideas, pero se mantuvo firme en su postura de no incluir imágenes de IA en el producto que le envió. Sin embargo, después de que Adobe anunciara su política de protección el verano pasado, el cliente levantó la prohibición.

“Esta política ha cambiado su actitud hacia el uso de herramientas de IA… Se sienten más protegidos al usarlas”, añadió Leong.

El tema de los derechos de autor es un tema seleccionado en el Concurso de Inteligencia Artificial 2024 (temporada 2) - Vietnam AI Contest 2024, donde los concursantes pueden explorar y crear libremente nuevas ideas, aplicando inteligencia artificial para proteger los derechos de autor y las obras.

Para obtener información detallada sobre el concurso, los candidatos pueden acceder a los canales:

Página de fans “VLAB Innovation”: https://www.facebook.com/vlabinnovation/

Sitio web: vlabinnovation.com

(Según Bloomberg)