Los ataques de ambos bandos han dejado miles de muertos y heridos, y se prevé que el número de víctimas aumente. La escalada de violencia aumenta el riesgo de una nueva guerra de gran magnitud en Oriente Medio.
Buque militar estadounidense cerca de Israel. Foto: Reuters
El Sr. Austin declaró haber ordenado el traslado del Grupo de Ataque del Portaaviones USS Gerald R. Ford al Mediterráneo Oriental, más cerca de Israel. La fuerza incluye el portaaviones, un crucero de misiles guiados y cuatro destructores de misiles guiados.
El Sr. Austin también afirmó que Estados Unidos ha tomado medidas para aumentar la flota de cazas F-35, F-15, F-16 y A-10 de la Fuerza Aérea estadounidense en la región. Añadió que Estados Unidos también proporcionará municiones a Israel.
El presidente estadounidense, Joe Biden, informó al primer ministro, Benjamin Netanyahu, el 8 de octubre que se enviaría ayuda adicional a las Fuerzas de Defensa de Israel y que habría más en los próximos días. La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, también habló por teléfono con el presidente israelí, Isaac Herzog.
El Pentágono dijo más tarde en una declaración que Austin habló con el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, para "expresar apoyo al pueblo de Israel y recibir actualizaciones sobre los esfuerzos de Israel para restablecer la seguridad y la protección ante la ofensiva de Hamas".
El Pentágono también indicó que Austin enfatizó que las medidas estadounidenses "se tomaron para fortalecer la postura militar estadounidense en la región y mejorar los esfuerzos de disuasión regional".
El ataque de Hamas en la madrugada del 7 de octubre fue el mayor y más mortífero ataque contra Israel desde que Egipto y Siria lanzaron un ataque sorpresa durante la Guerra del Yom Kippur hace 50 años.
Hoang Nam (según Reuters)
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