Fernando Villavicencio fue asesinado por un hombre armado tras un mitin de campaña en una escuela de la zona de Quito la noche del miércoles, tan solo 11 días antes de las elecciones. Fue el primer asesinato de un candidato presidencial en la historia de Ecuador.
Las autoridades ecuatorianas informan que un sospechoso armado murió en un tiroteo. La policía afirma que el sospechoso y otras seis personas detenidas en relación con el incidente son ciudadanos colombianos.
Candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio. Foto: Reuters
Anticorrupción
Mucho antes de postularse a la presidencia, el Sr. Villavicencio se hizo famoso erradicando la corrupción, los acuerdos secretos y el despilfarro en el gobierno y las principales industrias del país.
A lo largo de los años, como organizador laboral y asistente del Congreso y luego como periodista, legislador y candidato presidencial, ha denunciado la corrupción del país, haciendo referencias específicas a algunos de los nombres más importantes de la política y las finanzas ecuatorianas.
El Sr. Villavicencio descubrió evidencia de sobornos y esquemas de financiamiento de campañas bajo la administración del ex Presidente Rafael Correa, lo que condujo a tres cargos criminales contra el Sr. Correa y a su exilio en Bélgica desde que dejó el cargo.
El Sr. Villavicencio también acusó a altos ejecutivos de las industrias de petróleo, minería y energía de Ecuador, así como a importantes empresas extranjeras, de corrupción y tratos turbios.
Más recientemente, el Sr. Villavicencio ayudó a exponer la creciente presencia de cárteles de la droga en Ecuador, incluido el famoso Cártel de Sinaloa de México, que ha contribuido a una ola de criminalidad sin precedentes en el país.
Más recientemente, el Sr. Villavicencio le dijo a la multitud que estaba recibiendo amenazas de muerte por parte de jefes de pandillas.
La situación es desesperada.
El asesinato del Sr. Villavicencio pone de relieve el deterioro de la situación de seguridad en gran parte de América del Sur.
Años de débil crecimiento económico , inestabilidad política, la pandemia de COVID-19 y el creciente alcance de las bandas de narcotraficantes de cocaína están causando problemas no sólo para Ecuador sino también para muchos países de la región.
La seguridad en Ecuador se ha deteriorado desde la pandemia. La violencia ha estallado en muchas cárceles del país desde finales de 2020, dejando cientos de reclusos muertos.
Las pandillas que operan dentro de las cárceles de Ecuador han explotado los débiles controles estatales para expandir su poder, amenazando las vidas de los reclusos, según grupos de derechos humanos y familiares de los presos.
Fuera de las cárceles, los asesinatos se han disparado. Desde 2016, la tasa de homicidios en Ecuador ha aumentado casi un 500 %. Se prevé que el país tenga 22 asesinatos por cada 100.000 habitantes para 2022, según un informe de la firma global de inteligencia de riesgos Verisk Maplecroft.
El presidente Guillermo Lasso, que ha convocado elecciones presidenciales anticipadas para evitar un impeachment, ha culpado repetidamente a las bandas de narcotraficantes.
Lasso ha declarado frecuentemente estados de emergencia para reforzar la seguridad, incluyendo patrullas militares en las calles y toques de queda nocturnos.
Quoc Thien (según Reuters)
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