Se agilizará el trámite de visas para profesionales altamente cualificados. Foto ilustrativa: Reuters
El gobierno laborista federal dice que el actual sistema de inmigración, que permite seleccionar inmigrantes calificados mediante una prueba de puntos, será revisado para identificar a personas con las habilidades adecuadas que la economía australiana necesitará en el futuro.
La ministra del Interior, Clare O'Neil, declaró ante el Parlamento : «Nuestro sistema de inmigración está roto. Está fallando a nuestras empresas. Y, lo más importante, está fallando a nuestra gente. Esto no puede continuar».
Australia ha estado compitiendo con países como Canadá y Alemania para atraer a más trabajadores extranjeros altamente cualificados, con una demanda en aumento debido al envejecimiento de la población. El gobierno afirma que se agilizará y facilitará la tramitación de visas para profesionales cualificados, a la vez que se conservará a los graduados internacionales de las universidades australianas.
Clare O'Neil añadió que quienes tengan visas temporales para trabajadores cualificados o hayan sido denegados a solicitar la residencia permanente podrán hacerlo a finales de este año. Sin embargo, esto no aumentará la inmigración permanente anual a Australia, afirmó.
Australia aumentará su admisión de inmigración permanente en 35.000 a 195.000 para septiembre de este año para ayudar a las empresas a abordar la escasez generalizada de personal y se ha comprometido a desplegar más personal para acelerar el procesamiento de visas.
El Gobierno australiano anunció que a partir del 1 de julio aumentará el salario de los trabajadores migrantes cualificados de 53.900 dólares australianos a 70.000 dólares australianos (46.250 dólares estadounidenses) y lo mantendrá en el mismo nivel a partir de 2023.
La dificultad para atraer inmigrantes calificados surge en un momento en que Australia intenta impulsar el crecimiento económico y la productividad a raíz de la pandemia de Covid-19, con un desempleo que ronda el 3,5% y una escasez de trabajadores calificados en una variedad de industrias, incluida la atención a personas mayores, la salud y la defensa, informó Bloomberg.
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