Informes recientes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indican que la escasez de personal cualificado se está convirtiendo en un grave problema en muchas economías, especialmente en los países desarrollados. Esta situación no solo ejerce presión a corto plazo sobre el mercado laboral, sino que también amenaza la productividad, la innovación y el crecimiento a largo plazo.
Apertura de recursos humanos: la clave para resolver el problema de la escasez de mano de obra
Según la OCDE, debido a la caída de las tasas de natalidad, la población en edad laboral en los 38 países miembros de la organización será un 8% menor que la actual en 2060. En una cuarta parte de los países miembros de la OCDE, la disminución será de más del 30%.
A medida que aumenta la esperanza de vida, es probable que la proporción de personas que han superado la edad laboral respecto a las de entre 20 y 64 años en la OCDE aumente del 31 % en 2023 al 52 % para 2060. En Italia, Japón, Polonia, España y Corea del Sur, se prevé que la proporción supere el 75 %. El producto económico per cápita —un factor clave de los ingresos— crecerá a un ritmo más lento, ya que la población activa representará una proporción menor de la población.
Algunos gobiernos de la OCDE han introducido políticas para fomentar la fertilidad, incluyendo exenciones fiscales para las madres, como en Hungría, donde las exenciones fiscales aumentan con el número de hijos. Sin embargo, es poco probable que estos incentivos resuelvan todos los problemas, y la OCDE afirma que es demasiado tarde para que los incentivos a la fertilidad tengan un impacto positivo en el crecimiento de los ingresos durante los próximos 25 años.
Muchos países esperan que la IA ayude a cubrir parte de la escasez de mano de obra, especialmente en áreas que requieren automatización. Sin embargo, la OCDE señala que esta expectativa debe tomarse con cautela, ya que el impacto real depende de las habilidades, las políticas y la implementación de la tecnología.
Mientras muchos países luchan por hacer frente a la escasez de mano de obra debido al envejecimiento de la población, hay una solución que cada vez parece más práctica: ampliar los canales de inmigración legal para atraer recursos humanos del exterior.
Desde Italia hasta Corea del Sur, está en marcha una ola de ajustes a las políticas de visas y la asignación de trabajadores migrantes para abordar las crecientes brechas en sectores como la agricultura , la construcción, la atención de la salud y la manufactura.
El Gobierno italiano emite un gran número de visas para trabajadores extranjeros en la agricultura y el turismo.
El 1 de julio, el Gobierno italiano aprobó conceder cerca de 500.000 visados a trabajadores de fuera de la Unión Europea (UE) durante los próximos tres años.
El gobierno de la primera ministra Giorgia Meloni anunció que se permitiría trabajar en Italia a un total de 497.550 trabajadores entre 2026 y 2028, de los cuales unos 165.000 solo en 2026. Cabe destacar que el mayor número de visados durante los próximos tres años, unos 267.000, se expedirán para trabajos de temporada en los sectores agrícola y turístico.
Esto representa un aumento con respecto a la cuota original de 450.000 establecida por el gobierno en funciones para el período 2023-2025. Dicha cuota también ha aumentado de 75.700 para 2022 y aproximadamente 70.000 para 2021.
El primer ministro Meloni está tratando de reducir el número de personas que intentan ingresar a Italia ilegalmente, pero también está tratando de promover rutas de migración legal para atraer trabajadores de fuera de la UE para resolver la escasez de mano de obra en este país envejecido.
La federación de agricultores italianos Coldiretti acogió con satisfacción el nuevo sistema de visados como "un importante paso adelante para garantizar que haya suficiente mano de obra en los campos y con ella producción de alimentos".
Sin embargo, Maria Grazia Gabrielli, alta funcionaria de la Confederación General del Trabajo Italiano (CGIL), dijo que las nuevas cuotas no abordan la dinámica migratoria y las necesidades laborales, ya que el número de solicitudes de visa es mucho menor que las cuotas existentes.
Según la Sra. Gabrielli, la política italiana hacia los trabajadores extranjeros aún presenta numerosas lagunas, que también son aprovechadas por las bandas criminales. Por lo tanto, cree que los cambios estructurales son la clave para resolver la actual escasez de mano de obra.
Fuente: https://baolangson.vn/lao-dong-nuoc-ngoai-nhung-nganh-nghe-dang-thieu-tai-cac-nuoc-ky-1-5053369.html
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