(NADS) - La grasa visceral, la grasa que se esconde en las profundidades del cuerpo, es más que una simple capa inofensiva de exceso de grasa. Tras su apariencia antiestética, presenta graves riesgos para la salud, desde enfermedades cardíacas y diabetes hasta cáncer. Comprender y controlar la grasa visceral es clave para proteger la salud a largo plazo.
A diferencia de la grasa subcutánea, que se observa fácilmente en brazos, piernas o abdomen, la grasa visceral se acumula en las profundidades de la cavidad abdominal, rodeando órganos importantes como el hígado, el estómago, los intestinos e incluso las arterias. Según el profesor asociado Dr. Nguyen Anh Tuan, subdirector del Instituto de Cirugía Digestiva del Hospital Militar 108, la grasa visceral no se observa a simple vista y, por lo general, solo se detecta mediante métodos de diagnóstico por imagen como la tomografía computarizada o la resonancia magnética.
Un estilo de vida poco saludable es la principal causa de la grasa visceral. Consumir demasiadas calorías sin suficiente ejercicio facilita la acumulación de grasa abdominal. Además, a medida que envejecemos, el cuerpo tiende a almacenar más grasa visceral, incluso si no subimos de peso. Una dieta desequilibrada con consumo de alcohol, alimentos grasos y estrés prolongado también contribuyen al aumento de esta grasa dañina.
La grasa visceral no es solo "grasa pasiva", sino también "grasa activa" porque puede afectar significativamente la salud. El exceso de grasa corporal puede provocar resistencia a la insulina, incluso sin diabetes. La grasa visceral también aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares como hipertensión, accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio y algunos tipos de cáncer, como el de mama y el colorrectal.
Aunque la forma más precisa de medir la grasa visceral es con equipos avanzados como la tomografía computarizada o la resonancia magnética, estos son costosos y complejos. Los expertos recomiendan una forma más sencilla de estimar la grasa visceral: aproximadamente el 10 % de la grasa corporal total es grasa visceral. Puede usar dispositivos de medición de grasa corporal para determinar esta cifra. Si su nivel de grasa visceral supera 13 en la báscula, es señal de que necesita hacer cambios en su estilo de vida para proteger su salud.
Afortunadamente, la grasa visceral es muy sensible a los cambios en el estilo de vida. Según el profesor asociado Dr. Nguyen Anh Tuan, el ejercicio regular y una dieta saludable pueden reducir significativamente esta grasa. Realizar ejercicios cardiovasculares como trotar, andar en bicicleta o hacer aeróbic durante al menos 30 minutos al día, combinados con entrenamiento de fuerza 3 veces por semana, son las mejores maneras de quemar grasa visceral.
Además, reducir el estrés también juega un papel importante en la reducción de la grasa visceral. La hormona cortisol, que se libera durante el estrés, es un factor que provoca que el cuerpo almacene más grasa. Actividades como la meditación, la respiración profunda o la práctica de yoga pueden ayudar a controlar los niveles de estrés, reduciendo así el riesgo de acumulación de grasa.
Además de centrarse en el ejercicio, la dieta también juega un papel decisivo en el control de la grasa visceral. Debe evitar los alimentos procesados, ricos en azúcar y grasas no saludables. En su lugar, incorpore alimentos ricos en proteínas, verduras de hoja verde, carnes magras y legumbres. Al cocinar, priorice métodos bajos en grasa, como hervir o cocinar al vapor, y use aceites saludables como el de oliva en lugar de mantequilla o aceite de cacahuete.
La grasa visceral puede compararse con un "hombre oculto" en el cuerpo: no llama la atención de inmediato, pero silenciosamente causa una serie de graves problemas de salud. Como un volcán oculto, la grasa visceral puede no ser visible desde el exterior, pero cuando entra en erupción, las consecuencias pueden ser nefastas.
Nuestros cuerpos son como máquinas sofisticadas, y la grasa visceral es la "arena" que puede dañar los engranajes que funcionan correctamente. Para que esa máquina siga funcionando a la perfección, necesitamos mantener, cuidar y, sobre todo, eliminar regularmente factores potencialmente peligrosos como la grasa visceral.
La grasa visceral es difícil de detectar, pero es la causa de muchas enfermedades graves. Los cambios en el estilo de vida , desde el ejercicio regular hasta una dieta saludable y el manejo del estrés, son las mejores maneras de proteger el cuerpo de estos posibles riesgos. Piense en su cuerpo como una "casa": para mantenerla fuerte y saludable, es esencial eliminar la grasa visceral.
[anuncio_2]
Fuente: https://nhiepanhdoisong.vn/mo-noi-tang-dang-am-tham-de-doa-suc-khoe-con-nguoi-15255.html
Kommentar (0)