Según informó The Washington Post, el presidente Joe Biden anunció la inversión en la Casa Blanca el 26 de junio (hora local), con el objetivo de proporcionar soluciones de internet de banda ancha a los 50 estados y territorios del país desde ahora hasta 2030. Esta inversión se basa en el programa de despliegue de banda ancha y acceso equitativo, y forma parte de la ley de inversión en infraestructura de 1 billón de dólares que el Sr. Biden promulgó en 2021. «Esta es la mayor inversión jamás realizada en internet de alta velocidad. En la economía actual, todos necesitan internet para trabajar y el acceso a internet es tan importante como la electricidad, el agua u otros servicios básicos», declaró el presidente Joe Biden a los periodistas en la Casa Blanca.

El presidente Joe Biden anunció inversiones en internet de alta velocidad el 26 de junio. Foto: The Washington Post

Sin embargo, los 42 mil millones de dólares no se distribuirán equitativamente, sino que se dividirán según un mapa de cobertura de internet, en el que cada estado recibirá al menos 107 millones de dólares. Los dos estados más poblados de EE. UU., Texas y California, recibirán las mayores inversiones, con 3.100 millones y 1.900 millones de dólares, respectivamente. Estados menos poblados como Virginia, Alabama y Luisiana también figuran entre los 10 estados que recibirán mayor financiación, debido a sus extensas zonas rurales y la menor conectividad a internet en comparación con los centros urbanos. Se espera que los estados presenten sus planes para construir infraestructura de internet de banda ancha a finales de este año y reciban aproximadamente el 20 % de la financiación por adelantado. El gobierno de EE. UU. desembolsará el resto posteriormente. «Es fundamental que ninguna comunidad quede excluida de este proyecto», enfatizó Brandy Reitter, directora ejecutiva de la Oficina de Proveedores de Servicios de Banda Ancha de Colorado.

Hasta la fecha, muchas zonas de Estados Unidos siguen teniendo acceso limitado a internet de banda ancha. Según Reuters, las compañías de telecomunicaciones como Verizon, Comcast, Charter Communications o AT&T son cautelosas a la hora de proporcionar internet en zonas rurales y poco pobladas debido a los elevados costes de inversión y al limitado número de suscriptores potenciales. La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, añadió que, a día de hoy, todavía hay 24 millones de estadounidenses sin acceso a internet de alta velocidad porque no pueden permitirse la cuota mensual o porque viven en zonas que no cuentan con una cobertura total de fibra óptica. Esta situación ha suscitado gran preocupación pública desde el inicio de la pandemia de la COVID-19, que obligó a muchos estudiantes estadounidenses a cursar sus estudios en línea.

Se espera que la inversión anunciada recientemente por el presidente Joe Biden ayude a 8,5 millones de hogares y empresas en los EE. UU. a obtener acceso a infraestructura de internet de alta velocidad.

El Washington Post señala que internet es una forma segura para que muchos estadounidenses trabajen, estudien, compren y se mantengan en contacto con sus seres queridos. Una encuesta del Pew Research Center de 2021 reveló que el 60 % de los consumidores de bajos ingresos afirmó haber tenido problemas frecuentes al usar servicios en línea durante la pandemia de COVID-19 debido a la lentitud de la conexión a internet. Además, casi la mitad de los encuestados se quejó de sentir ansiedad por no poder pagar su factura mensual de internet.

ANH VU