En el mundo del café, los granos de robusta han sido considerados durante mucho tiempo los hermanos menores de la arábica. Pero en Vietnam, el mayor exportador mundial de robusta, se está escribiendo una historia. Esta historia no se centra en la producción, sino en la identidad, el orgullo y la aspiración de llevar los granos de café vietnamitas, el "diamante negro", a un lugar destacado en el panorama internacional. A la vanguardia de esta tendencia se encuentra Highlands Coffee, una marca que está redefiniendo la robusta como símbolo del espíritu vietnamita.
La identidad única del café Robusta vietnamita en el mundo del café
Vietnam concentra casi el 40% de la cuota de mercado mundial de robusta, pero durante décadas, el valor de este grano se ha infravalorado en comparación con el arábica. Sin embargo, este prejuicio está cambiando gradualmente gracias a la evolución de las preferencias de los consumidores y al esfuerzo constante de las empresas dedicadas a su cultivo. La robusta se está consolidando como un café con una identidad propia: rico, fuerte y con gran potencial.
La Sra. Nguyen Thi Thom, Gerente de Producto de Café en Highlands Coffee, compartió: “Como vietnamita, encuentro que el café Robusta es adecuado para mí. El Robusta es rico, fuerte y resistente, al igual que el pueblo vietnamita”.
Esta perspectiva refleja la estrategia central de Highlands Coffee: no suavizar ni ocultar las características del Robusta, sino invertir en comprender, mejorar y contar la historia de este grano con mayor precisión. Esto se demuestra a través de la investigación sobre fórmulas de mezcla, la mejora de las técnicas de tostado y el desarrollo de productos exclusivos como Vaaang Robusta.
Christopher Jordan, director de Highlands Cai Mep Coffee Roastery y experto con más de 25 años de experiencia en marcas líderes como Starbucks y Verve, compartió la misma opinión: “El robusta está viviendo un auténtico renacimiento por muchas razones. Una de ellas es el auge de las mejoras en el procesamiento, ya que los caficultores seleccionan las cerezas de café a mano con mayor esmero. Además, métodos de procesamiento experimentales como la fermentación anaeróbica están transformando el sabor del robusta. Cuando se selecciona y procesa correctamente, se convierte en un café muy interesante, que destaca en diversas técnicas de preparación modernas, como el pour-over o el espresso”.
La base de la excelencia: Estandarización desde el corazón
Para que el café robusta vietnamita alcance con confianza los estándares internacionales, la excelencia en las habilidades humanas debe estar respaldada por un sistema de producción estable, consistente y estandarizado. Consciente de ello, Highlands Coffee ha invertido cerca de 500 mil millones de VND en la construcción de la planta tostadora de café Highlands Cai Mep. Con una superficie de 24.000 m² y una capacidad de diseño de hasta 75.000 toneladas anuales, esta planta no es solo un centro de producción, sino una muestra de compromiso con la calidad.
Estratégicamente ubicada en el puerto de Cai Mep, la fábrica está equipada con tecnología de tostado PROBAT de Alemania y estrictos sistemas de control de calidad. Todo el proceso, desde la recepción de la materia prima, la inspección y el tostado hasta el envasado, está estandarizado y digitalizado. «La nueva fábrica desempeña un papel fundamental. Nuestro valor principal reside en cómo producimos productos de la más alta calidad y estabilidad para nuestros consumidores», explicó la Sra. Thom sobre la función de la fábrica. Para ella, la tecnología moderna debe ir de la mano de las personas. Repitió las palabras del fundador David Thai: «La tecnología moderna solo puede alcanzar su máximo potencial cuando contamos con personas que comprenden esa tecnología y los productos que elaboramos; solo así podemos producir los mejores productos».
El Sr. Christopher Jordan también compartió con orgullo detalles sobre su equipo en Highlands Coffee: “Nuestras instalaciones son muy modernas, pero lo que más me impresionó fue el equipo humano. Nuestro equipo vietnamita es verdaderamente de clase mundial en todas las áreas de especialización: desde I+D, desarrollo de productos, ingeniería, producción, control de calidad y garantía de calidad; es un equipo excelente”.
La trayectoria de Highlands Coffee muestra un camino claro: la internacionalización no implica necesariamente abandonar la propia identidad. Al contrario, la clave para crear valor sostenible reside en profundizar, comprender y celebrar genuinamente el patrimonio local, aunado a estándares internacionales de calidad e innovación.
Con medidas estratégicas y una visión a largo plazo, Highlands Coffee está haciendo una importante contribución para que, en los próximos 5 años, como predijo la Sra. Thom, los granos de Robusta sean recibidos con mayor entusiasmo en todo el mundo, no solo como una mercancía, sino como un mensajero que transmite la historia, la cultura y el orgullo de Vietnam.
Fuente: https://doanhnghiepvn.vn/doanh-nhan/tai-dinh-vi-robusta-viet-tu-di-san-ban-dia-den-chuan-muc-toan-cau/20250621102410893






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