El Bangkok Post informó el 4 de octubre que la fiscalía presentó cinco cargos contra un adolescente que abrió fuego en el centro comercial Siam Paragon de Bangkok el 3 de octubre, matando a dos personas e hiriendo a otras cinco. Los cargos incluyen homicidio premeditado, intento de homicidio, posesión ilegal de armas, porte ilegal de armas y tiroteo en un lugar público.
El sospechoso podría enfrentar cargos adicionales mientras los fiscales también están considerando acusar a los padres del pistolero bajo las leyes de protección infantil.
Policía especial tailandesa en el centro comercial Siam Paragon en la noche del 3 de octubre.
La mala experiencia del príncipe heredero
El príncipe heredero Tunku Ismail Sultan Ibrahim de Johor Bahru, Malasia, declaró que él, su esposa y sus cuatro hijos se encontraban en el vestíbulo de un hotel cerca del centro comercial Siam Paragon cuando ocurrió el tiroteo. El príncipe afirmó haber oído gritos y visto a mucha gente corriendo, según Channel News Asia.
"Llevamos a los niños a un lugar seguro, bajamos corriendo al sótano con mi equipo y lo único que tenía en mente era cuántos hombres armados había allí, qué armas tenían y cuál era la situación", escribió Tunku Ismail en Instagram la noche del 3 de octubre.
El príncipe heredero declaró que él y su equipo de seguridad se colocaron frente a sus familiares para protegerlos a toda costa. Tunku Ismail solicitó entonces a las fuerzas de seguridad que trajeran un vehículo para trasladarlos a un lugar seguro.
Originalmente habían planeado ir a la embajada de Malasia, pero el conductor les dijo que la de Singapur estaba más cerca, así que el príncipe llamó al Cónsul General de Singapur en Johor para pedir ayuda. También llamó al primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, y al ministro de Defensa, Mohamad Hasan, para informarles del incidente, y les dijo que la familia regresaría a Johor cuando todo estuviera seguro. "Esta es la peor experiencia que he tenido. Salvar la vida de mis hijos de un asesino", escribió el príncipe.
El príncipe heredero de Johor, Tunku, Ismail Sultan Ibrahim, con su esposa y sus cuatro hijos.
INSTAGRAM hrhcrownprinceofjohor
El sospechoso permanece bajo custodia
El sospechoso de 14 años fue llevado ante el tribunal de menores por la policía el 4 de octubre, con el rostro cubierto para proteger su identidad. El tribunal rechazó la solicitud de la policía de enviar al sospechoso a un centro psiquiátrico, alegando que no podía confirmar que tuviera problemas mentales. En su lugar, el sospechoso permanecerá recluido en un centro de detención juvenil y se someterá allí a una evaluación psicológica.
La policía había declarado previamente que el pistolero parecía confundido y no pudo dar una versión coherente de los hechos. También afirmó haber oído voces que le ordenaban disparar a otras personas. El adolescente había recibido tratamiento por problemas de salud mental en un hospital.
En relación con la investigación, el mayor general de la policía tailandesa, Nakhari Sukhonthawit, declaró que se encontraron una pistola de aire comprimido y varias balas en la habitación del sospechoso en su domicilio, ubicado en la zona de Lak Song de Bangkok. El subjefe de la policía nacional, Samran Nuanma, indicó que el arma utilizada en el ataque fue una pistola "modificada" para disparar balas de fogueo.
El primer ministro tailandés, Srettha Thavisin, anunció el 4 de octubre que se tomarían medidas para evitar que los jóvenes accedieran a armas peligrosas. En un evento en el centro comercial, el Sr. Srettha afirmó que el gobierno abordaría el problema del acceso a las armas, incluidas las armas modificables.
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