Hubo una época en que mis ingresos mensuales eran de cientos de millones. Trabajaba de 10 a 12 horas al día y por la noche solo navegaba en mi teléfono y me dormía tranquilamente.
Navegar por Internet para buscar ofertas se ha convertido en un hábito para muchos jóvenes hoy en día - Foto: YEN TRINH
Un fin de semana, me senté a tomar un café con un viejo amigo. La conversación giró en torno al trabajo y la vida, y finalmente terminó con la pregunta: "¿Cuánto dinero crees que necesitas ganar al mes para vivir, o al menos para ser feliz?".
¿Tiene ingresos altos y aún está preocupado?
Mi amigo tiene unos ingresos bastante altos, pero aún así se preocupa por el futuro. No me sorprende. Porque a menudo, incluso cuando alcanzamos el salario ideal, seguimos sintiendo que no es suficiente.
Entonces, ¿cuánto dinero es suficiente para que los jóvenes puedan vivir en la ciudad sin preocupaciones?
Hace más de diez años, cuando me gradué, mi salario inicial era de 8,6 millones de VND al mes. En aquel entonces, pensé: «15 millones de VND probablemente sean suficientes para vivir cómodamente».
Cuando llegué a ese nivel, descubrí que 30 millones de VND era la cifra ideal. Y cuando conocí a gente que ganaba entre 50 y 100 millones de VND al mes, me pregunté: "¿Estaré ganando muy poco?".
A menudo, sin querer, establecemos estándares cada vez más altos, influenciados por muchas personas que nos rodean y por las redes sociales.
Cuando alguien presume de su viaje a Europa, de la compra de un coche nuevo o de una casa de lujo, todos se dicen: "Yo también tengo que esforzarme más".
Así que me lancé a trabajar, bajo mucha presión, pero al final me di cuenta de que mayores ingresos no significaban menos preocupaciones.
Solía creer que tener mucho dinero significaba felicidad. Pero eso no es necesariamente cierto.
Mucho dinero, pero poco tiempo para gastarlo. Se gana bien, pero la salud es precaria. Salario alto, pero un trabajo estresante y desorientador.
El economista ganador del Premio Nobel Daniel Kahneman estudió el «punto de saturación de ingresos». Descubrió que, tras alcanzar un nivel de ingresos cómodo, ganar más dinero ya no tiene un gran impacto en la felicidad.
Es decir, una vez que tienes suficiente dinero para pagar una vida estable, el resto sirve principalmente para crear una sensación de seguridad, no necesariamente para hacerte más feliz.
Pero ¿por qué suben los salarios y aún nos sentimos incapaces? Creo que en parte se debe al consumismo.
¿Alguna vez compraste algo caro, te sentiste feliz por unos días y luego se volvió normal?
Se llama "efecto de adaptación", donde las personas tienden a acostumbrarse rápidamente a lo que tienen y luego quieren algo mejor.
Antes del iPhone, solo necesitábamos un teléfono para llamar. Pero después de tenerlo, queríamos un modelo más nuevo y mejor.
Cuando aún conducía moto, pensaba que tener un coche sería genial. Pero después de comprarme uno, me di cuenta de que necesitaba uno más lujoso. Este ciclo nunca se detiene a menos que conozcamos nuestros límites.
Trabaja duro, tienes dinero pero aún estás vacío
Muchos jóvenes, incluido yo, hemos caído en un estado de estar ocupados pero vacíos.
Hubo una época en que mis ingresos mensuales eran de cientos de millones. Trabajaba de 10 a 12 horas al día y, por la noche, solo navegaba en mi teléfono y me dormía tranquilamente.
Y entonces me pregunté: ¿Estoy realmente viviendo o sólo sobreviviendo?
Solía pensar que solo al lograr grandes cosas me sentiría feliz. Pero resulta que son las pequeñas cosas las que me hacen feliz cada día.
La felicidad no tiene por qué venir de los lujos. Puede ser una mañana tranquila con una taza de café aromático, una comida deliciosa con los seres queridos o una tarde paseando por las calles sin prisas.
Si odias tu trabajo actual, debes encontrar una manera de conectarlo con un objetivo más grande.
Por ejemplo, si eres trabajador de oficina, podrías pensar que este trabajo te da estabilidad financiera para hacer lo que amas.
Me parece interesante que quienes dedican tiempo a ayudar a los demás suelen ser más felices. Porque ayudar a alguien con una pequeña tarea hace que la vida se sienta más valiosa, o cuando se gasta dinero en la familia, el dinero se siente más significativo.
El nivel de ingresos no es el factor determinante de la comodidad en la vida.
Saber asignar y utilizar sabiamente el dinero, gastar económicamente y priorizar las necesidades esenciales hará la vida más fácil.
El psicólogo Martin Seligman, padre de la psicología positiva, ha dado factores que ayudan a las personas a ser verdaderamente felices, tales como: Vida positiva, disfrutar de las pequeñas alegrías; Conexión, hacer cosas significativas.
Cubrir los gastos básicos de vida (vivienda, comida, transporte, seguros); Tener ahorros para no preocuparse por el futuro; Tener suficiente dinero para disfrutar de pasatiempos, viajes y experiencias; No sentirse agobiado por la presión financiera todos los días...
¿Cuánto ingreso es suficiente?
La respuesta no está en el número, cada persona tiene un nivel diferente de “suficiente”.
En mi opinión, basta con saber. Hay un dicho que dice: «Los ricos no son los que más dinero ganan, sino los que saben lo suficiente».
Pero en cualquier caso, lo más importante es ganar dinero sin dejar que el dinero controle tu vida. Una vida deseable no se mide por los ingresos, sino por el equilibrio entre trabajo, salud y felicidad.
Porque después de todo, el dinero es sólo una herramienta y cómo lo usamos determina nuestra vida.
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Fuente: https://tuoitre.vn/thu-nhap-ca-tram-trieu-moi-thang-toi-van-thay-trong-rong-vi-sao-20250218094001593.htm
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