En Japón, había un niño que, lamentablemente, sufría una grave enfermedad. La enfermedad le causaba un gran dolor en el cuerpo y en el corazón. Un día, alguien dijo que si doblaba mil grullas, ocurriría un milagro y sus deseos se cumplirían. El niño superó esos días tormentosos con el poder de la fe. Gracias a ello, se sentía alegre, feliz y lleno de energía vital. Se despidió de este mundo con un sueño incompleto, y la grulla número mil, que aún no había completado...
La gente aún se cuenta la historia del niño y siempre cree que si se juntan 1000 grullas, un deseo se cumplirá. Desde entonces, la grulla se ha convertido en un símbolo de magia y de muchos valores. No solo entre los japoneses, la imagen de esta ave de la suerte también aparece en todo el mundo.
Inspirados por la historia de la grulla, esta Navidad, todo el personal del restaurante Ngon Garden, Quan An Ngon, Mon Ngon Sai Thanh, dobló 1000 grullas de papel para crear un árbol de Navidad gigante. En cada grulla hay una oración que envía buenos mensajes para sí mismos, para los demás y para el mundo.
Un pino especial, entre un bosque de familiares árboles de Navidad en cada esquina. Un producto hecho completamente a mano, con la firme convicción de que los sueños se hacen realidad.
Con esta hermosa imagen, junto con platos con auténticos sabores vietnamitas, les deseamos a todos y a cada familia una feliz Navidad. Se acerca una nueva Navidad, una nueva temporada festiva. Aunque la vida esté llena de ajetreo, presión y preocupaciones, esas creencias aún nos traen cosas hermosas cada día.
PV
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